ALEXANDER GUILLÉN Y FABIO CASTAÑEDA TRINFADORES EN EL FESTiVAL DE TOCUYITO por Rubén Darío Villafraz

 

Este sábado 

en la Hacienda Country Club

 de Tocuyito

“El Rubi”, Guillén y Castañeda, a hombros ante bravos astados de Los Aránguez

RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ

@rubenvillafraz

Finalmente y luego de poco más de 17 meses sin ningún atisbo de actividad taurina y sí mucha incertidumbre, este sábado se vería el que de nuevo la fiesta brava retomara a manera formal su protagonismo como es el del toro y torero en la plaza, lo que ya abre la posibilidad el que otros escenarios del país tomen igualmente la iniciativa por reactivar un renglón como el taurino donde se ha sufrido calladamente estos meses, al igual que muchas familias lo han hecho con los suyos… el COVID no ha tenido compasión con nadie, y menos con el lio del toro, el cual en nuestra geografía nacional venia en “picada” mucho antes de la mencionada pandemia.

Artífices de este renacer taurino como le pudiéramos llamar los nombres de los aficionados Paco Sanz, Hermes Quintero, Ernesto Isaac y Luis Miguel Valencia, quienes contra viento y marea, además de la antipatía de muchos, echaron adelante las ilusiones y sobre todo el sentir de muchos… Ahora queda que otros ruedos de importancia como los de Mérida, Tovar, San Cristóbal, sin dejar a un lado Maracay, la Monumental de Valencia, Maracaibo y otras más de la provincia nacional despierten de este largo letargo.

Poco se le pudo lucir en la capa al abreplaza a cargo del espada caraqueño Luis Pietri, quien no se le vio en ningún momento a gusto ante las correosas y encastadas embestidas del animal, ejemplar que pasó por varas y banderillas haciéndose dueño de la escena. Con cautela y en su querencia Pietri quiso, lo intentó, pero no lograría dar con la tecla del lucimiento, a tal punto de vérsele por momento desbordado por «Tocuyito», N° 73 de 440 kilos. Le despenó con brevedad, siendo premiado gentilmente con una oreja. Por cierto, debió abrir plaza “El Rubi” por ser de mayor antigüedad de alternativa en vez de Luis Pietri, sin saber las razones de este hecho.

Solvencia y veteranía la demostrada por “El Rubi” con su antagonista, ofreciéndole las opciones de sitio, temple y distancia que pedía el burel en los medios, donde supo sacarle partido en series por ambas manos de gran calado entre los presentes. Se prodigó en toreo parco y del bueno Manuel Medina, para luego de certero volapié, cortar las dos orejas del astado.

Inspirado manojo de verónicas las que se jactó dejar en la retina Alexander Guillén con «Morroco» N° 90 de 475 kilos, dejando clara sus intenciones de triunfo desde el primer momento. En el caballo y en banderillas su lidia fue mero trámite con poco lucimiento por parte del peonaje, para en la muleta Guillén hacerse con las nobles y exigentes embestidas del animal, al que lidiaría en los medios del redondel, dejándole la pañosa adelante, aprovechando la inercia del primer muletazo para luego sacar tandas de cuatro o cinco y el de pecho… en especial por la mano diestra, donde se rebozaría el veterano diestro emeritense quien se reencontraba con el público tras su desafortunada actuación en el marco de la Feria del Sol el año pasado, donde sufriría la fractura del humero izquierdo por uno de estos mismos hermanos de camada. No vaciló con el acero, para ser premiado con las dos orejas y la ovación unánime de los presentes.

Lo contrario le ocurriría a su compañero de cartel, Jonathan Guillén, quien cupo en suerte un gran ejemplar en cuarto lugar, de embestida almibarada, de esas que cuando se le entiende y dispone es para soñar el toreo. Lamentablemente no lo fue así esta tarde para un Jonathan a quien le vieron fuera de sitio, dubitativo y por momentos sin un claro concepto de la lidia, que dejo mucho que desear y el pesar de ganadero, taurinos y público en general por no haberse aprovechado a tan noble y pastueño morlaco. Un quinario con la espada, hasta el punto de escucharse los tres avisos y tener que apuntillarse al astado en un burladero. La ovación al ejemplar en el arrastre y la bronca para el torero, una radiografía de lo visto en el redondel.

Con el cierra plaza, Fabio Castañeda dejaría sus mejores momentos en el aterciopelado recibo por verónicas que interpretó, sin duda las cotas más altas de su labor, pues luego en la muleta, intermitentes serían los momentos de lucidez del espada tachirense, destacando de todos estos por la mano diestra donde hizo méritos a la ovación más unánime de los presentes. El espadazo ligeramente desprendido pero fulminante dio pie a la concesión generosa de las dos orejas, compartiendo el honor de la salida en hombros en compañía de “El Rubi” y Alexander Guillén.

FICHA DEL FESTEJO

Sábado 24 de julio de 2021. Festival Taurino en conmemoración del 238º aniversario del natalicio del Libertador Simón Bolívar. 

Plaza de Toros Hacienda Country Club de Tocuyito.

Con poco menos de medio aforo de lo permitido (aproximadamente 180 personas) en tarde soleada y calurosa se han lidiado reses del hierro caroreño de Los Aránguez (Jesús Riera) en conjunto bien presentados, pero excesivamente y mal arreglados de pitones, bravos en distinto grado, destacando por su recorrido los lidiados en 3º y 5º lugar, ovacionados en el arrastre. Pesos: 440, 344, 475, 460, 480 kilos.

Luis Pietri, oreja. Manuel Medina “El Rubi”, dos orejas. Alexander Guillén, dos orejas. Jonathan Guillén, bronca tras tres avisos. Fabio Castañeda, dos orejas.