TIENTA EN EL SABINO, GANADERÍA ESTADOUNIDENSE Por Adiel Armando Bolio

 

Las labores de campo las encabezó el matador de toros guanajuatense Diego Silveti y se dio gustó con la bravura y calidad de sus reses 

 

  

En el campo bravo estadounidense se reporta que un grupo de 11 aficionados taurinos que radican en Houston, Estados Unidos, se juntaron para fundar y formar la ganadería de El Sabino en 2017, iniciando con vacas de la dehesa tamaulipeca de don Rafael Mendoza, de procedencia San Martín. 

Y posteriormente se agregaron 13 vacas y un toro como semental de la ganadería zacatecana de Pozo Hondo, del encaste Llaguno. 

Se comenta entonces que con mucho esfuerzo y dedicación dicha oncena ganadera ha ido poco a poco logrando que esta ganadería crezca y dentro de ello lograron ya armar una plaza de tienta y el pasado fin de semana pudieron realizar en forma su primera tienta. 

Diego Silveti, en la gráfica, el matador Fernando Ochoa y el novillero Cayetano Delgado estrenaronel tentadero de la ganadería norteamericana El Sabino

Para este acontecimiento, los aficionados y ahora ganaderos echaron cinco novillos y un par de becerras, siendo lidiado todo el ganado puesto a prueba por el diestro guanajuatense Diego Silveti, contando con la ayuda del diestro retirado michoacano Fernando Ochoa, buen amigo de los nuevos ganaderos y, el novillero neoleonés Cayetano Delgado. 

Asimismo, pendientes del producto que habían mandado para la formación de esta dehesa estadounidense, la familia Alatorre Rivero, ganaderos de Pozo Hondo, estuvieron presentes. 

Al final de cuentas, la tienta resultó positiva, hubo animales con bravura y clase. Dos de los novillos, por cierto, fueron aprobados para ser futuros sementales. 

Sin lugar a dudas, se apunta, es un logro maravilloso lo que está haciendo este grupo de aficionados ganaderos, teniendo un mérito extraordinario por lo complejo que resulta todo este proceso. 

Además, tienen igualmente la intención de hacer más adelante una plaza de toros formal para montar algunos festejos taurinos por allá. Por ello, a esa oncena de entusiastas ganaderos de Houston, Texas, le deseamos la mejor de las suertes a esta apasionante aventura.