CURRO ROMERO

"SI NO NOS UNIDOS ESTO SE VA AL TRASTE"



El «faraón» de Camas y Enrique Ponce debatieron en el Club Siglo XXI sobre el futuro de la Fiesta


P. GARDEU | MADRID


A las ocho de la tarde de ayer, las figuras más representativas del ambiente taurino, de punta en blanco, se dieron cita en el Club Siglo XXI de Madrid. El motivo era la celebración del coloquio «Los jóvenes del siglo XXI y el mundo de los toros», protagonizado por los matadores de torosCurro Romero y Enrique Ponce.
El acto, moderado por la directora del club, Paloma Segrelles, fue presentado por Alfonso Ussía y Albert Boadella.
La plaza la abrió Boadella. El director de Els Joglars y de los Teatros del Canal esbozó un amplio alegato a favor de la fiesta taurina, para el cual hizo un recorrido acerca de por qué le gustaban los toros. Los motivos iban desde «porque no es un espectáculo, es un ritual» hasta «no hay nada tan ecológico como los toros».
Además, defendió que se llevase a los niños a las corridas, alegando que son «enormemente didácticas», y señaló que prohibir llevarlos es «anticonstitucional».
Eso sí, explicó que denominarlos «Fiesta Nacional» es una «frivolidad». Destacó también el papel de los antitaurinos porque «nos hacen pensar y defender el arte que estimamos».
«Si no nos unimos, esto se va al traste»
El siguiente en intervenir fue Ussía, que provocó un encontronazo con los fotógrafos al protestar por sus flashes. Los medios, ofendidos por sus palabras, abandonaron la sala en señal de protesta.
Durante la tertulia, se habló del «pasado, presente y futuro» de «la Fiesta». Enrique Ponce criticó que en los últimos veinte años no se ha evolucionado: «El toreo vive un momento de imposible evolución».
Coincidió con él Curro Romero, que aseguró: «Si no nos unimos, esto se va al traste».
Ambos afirmaron que el cambio más importante es el prototipo de toro bravo, más grande que el de antaño y menos claudicante, lo que está facilitando que cada vez se vean «faenas más vistosas y redondas».
«Desavenencias» en las Ventas
Enrique Ponce fue preguntado acerca de la posibilidad de corridas en las que no se mate al toro, a lo que el diestro respondió: «Ya se hace en Portugal, y es más digno que muera con una espada a que muera con un tiro».
Por otro lado, el diestro reconoció que había «desavenencias con la compañía», razón por la cual, no torea en las fiestas madrileñas de San Isidro: «Ha habido un desacuerdo, y yo tampoco podía admitir lo que ellos me ofrecían».
Precisamente a la afición madrileña quiso Ussía describir en el acto. El escritor calificó al público como «paleto, cobarde, que cree que es entendido, pero es un público de pueblo».
Al pie de estas declaraciones, la periodista María Teresa Campos, presente entre los asistentes, propuso, aportando así un toque de humor a la tarde, que en previsión de que ante un público así, las corridas en la plaza de toros madrileña tuviesen que suspenderse, se podría crear «un enorme centro comercial en las Ventas».
«El público madrileño es paleto, cobarde y se cree entendido, pero es un público de pueblo»
Tras el acto, y sin que la sangre de ninguna disputa llegase al ruedo, todos los asistentes -entre los que también se encontraban la ex ministra de Cultura Carmen Calvo, la esposa de Ponce, Paloma Cuevas, y la periodista Beatriz Cortazar- charlaron animadamente mientras bebían copas de vino y exhibían sus mejores sonrisas y sus mejores galas.