miércoles, 20 de julio de 2022

LOS TOROS GENERAN VIOLENCIA por Víctor José López EL VITO



 

Es la frase a la que recurren los ignorantes en contra de la Tauromaquia. Advertencia recurrida, esgrimida por los enemigos de la Tauromaquia en su afán de borrar del mundo al  toro de lidia, como individuo y especie.  Borrar la cultura que le rodea a la especie bovina que ellos dicen proteger y defender. Sin embargo jamás llega una noticia, información o reclamo, que tenga que ver con la generación de violencia por causa de la Tauromaquia. No así con el fútbol, como espectáculo que genera odios, conflictos, guerras y violencia entre los rivales.



 No quiere decir que nos opongamos al deporte, sus competencias, ejercicios y pasión que generan los clubes de futbol. Somos aficionados al fútbol, sus clubes y competencia, pero no ciegos para no ver lo que sucede en las canchas del mundo. Fuimos testigos en Querétaro, México, de asesinatos   en el Estadio de La Corregidora. El mundo ha visto por años crecer la violencia generada en la competencia de los equipos en Argentina, Inglaterra, Italia. También en Alemania, Escocia, Italia, Francia, Dinamarca … lo mismo en  España, y también en Venezuela donde conflictos en estadios de Barinas, Valera, Valencia, Mérida y San Cristóbal son cosa de cada día. 


Hechos jamás reseñados en una Plaza de Toros, donde también se reúnen públicos de distintos  rangos, diferentes clases, y de la más variada filiación política.

  

Gustavo Le Bon (1895) define la multitud  como “agrupación humana con los rasgos de la pérdida de control emocional, mayor sugestionalidad, contagio emocional, imitación, sentimiento de omnipotencia y anonimato para el individuo. 


La definición del sociólogo Gustavo Le Bon, estudioso de la sicología social y grupal, encubre la violencia en el fútbol. Alegando las principales causas de la conducta de la masa se altera cuando el individuo se integra a la multitud, transformándose en un ser  invencible. El hincha del fútbol se convierte en un ser incontrolable,  primitivo, y descontrolado e inconsciente y ajeno al temor del castigo. 

Considera el maestro Le Bon que el ser humano, hombres y mujeres son sugestionables.





Los grupos de aficionados violentos y sus conductas como integrantes de la masa provocan los hechos violentos que tienen lugar en el mundo del deporte. Concretamente en el del fútbol, actos estructurados y animados por medios para ser vendidos y consumidos por las audiencias. 

La integridad del toro de lidia impide lo que genera la violencia en la conducta del ser humano.




Una audiencia cada vez más acrítica, poco reflexiva, pero también difícil de sorprender, de ahí el uso de un discurso bélico y agresivo que realce la noticia.

Estamos claros, paciente y amable lector  que vamos a oponernos a la práctica del fútbol, y mucho menos con los argumentos del Fiscal Usurpador y mucho menos aceptaremos los pobres e ignorantes argumentos de Tarek. Solo pedimos no mentir. 

Exigimos Libertad para la expresión constitucional de los toros. Libertad y Respeto al taurino, respeto al toro de lidia criatura con millones de años sobre la faz de la tierra llenando  espacios religiosos, deportivos, folklóricos y muy especialmente bastión de la Tauromaquia. 

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