domingo, 15 de mayo de 2022

GINÉS MARÍN COBRÓ CARO EN TARDE DESEQUILBRADA Y VACÍA por Víctor José López EL VITO



Equilibrio de fondo y de forma, de contenido y de continente, es lo clásico para el éxito en la tauromaquia. La terna para la lidia de los toros de El Parralejo que integraron Curro Díaz, Álvaro Lorenzo y Ginés Marín pasó trabajo intentado lograr serena armonía y dominio de la materia. 

 

Lo impidió la irregularidad de los toros procedentes de tres divisas El Parralejo, Borja Domecq y José Vázquez; dos de ellas fraternas con su irregularidad en la embestida y variada presentación impidieron la reclamada armonía provocando una batalla de adjetivos en los tendidos los que, imaginamos, también surgirán en la literatura taurina torno a las faenas realizadas ayer en Las Ventas.

 

Los hechos en el transcurso de la tarde se reflejaron como actitud en los grupos nihilistas, los mismos que por años han hecho con sus posturas tradicionales el irracional descontento que califica Las Ventas: para algunos, justos y entendidos, para otros ignorantes y provocadores del desorden.

 

Curro Díaz, pudo haber redondeado una tarde exitosa de no haber provocado un derrame escandaloso en su primer toro, primero de la tarde y primero de El Parralejo en los registros de Las Ventas. Toro ovacionado en el arrastre, de emotivo comportamiento y presencia; Díaz en segundo lugar pasó inadvertido y en sustitución del herido Gines, en el sexto y último toro de la tarde, astado de feas hechuras e incierto comportamiento arrancó una oreja por buena estocada.

´Álvaro Lorenzo literalmente se había vestido en el hospital donde le atendieron de una cornada que recibió el domingo al inaugurarse en Madrid el abono de San Isidro. Valiente, y enterado este joven torero que le arrancó una oreja al quinto de la tarde. Lleva dos apéndices en Madrid en lo que va de temporada. Injustos los madrileños con Álvaro Lorenzo, torero que superó los caminos de la sublimación ante los broncos astados. No porque despreciara el dolor de su herida abierta desde hace una semana,  ocasionada por una cornada la tarde inaugural del San Isidro de esta temporada, sino porque intentaban borrar el esfuerzo del torero.

No lo lograron y Lorenzo ascendió otro peldaño en la escalera del éxito. 

Un toro lidió Ginés Marín, y lo toreó muy bien por verónicas rompiendo un hechizo que surge en Las Ventas, entre los especialistas a la verónica, Ortega y Aguado, se han estrellado ante algún maleficio que les impide lucirse con la suerte que les hace famosos. Ginés vino a Madrid a revivir el éxito que le abrió la puerta grande en la tarde de su presentación, vino a eeclamar un puesto que le pertenece en el escalafón. No logró satisfacer su ambición ante el gazapo en el mando de El Parralejo, que le atravesó con ese finísimo pitón, asta  que actuó como picahielo más que como cuerno en el mansurrón cinqueño al que lidió con gracia y soltura y disfrutó del apoyo de la afición.  Perdió su primera oreja al provocar con su estocada mal colocada desagradable derrame, sino por acompañar - molestar- con palmas de tango los buenos momentos del torero en los tres toros que le tocó lidiar por herida de Ginés Marín.


 Injustos los tendidos con Álvaro Lorenzo, que superó los caminos de la sublimación ante los broncos astados. No porque despreciara el dolor de su herida abierta desde hace una semana,  ocasionada por una cornada la tarde inaugural del San Isidro de esta temporada, sino porque intentaban borrar el esfuerzo del torero. 

No así ante la heroica actitud de Ginés Marín, entendida y evaluada por el público de Madrid que cuando quiere y le da la gana exalta los valores sobre los que se sostiene la tauromaquia. Polémica trazada sobre el ruedo, con arrebatos de óleo y luz en el alma; pero no por puro verbalismo explosivo, sino porque el torero ha de crear sobre un ser vivo concreto y real, con ritmo e ímpetu propios e independientes, como es el toro de lidia.

¿Será preciso recordar que para que haya arte en la fiesta es necesario que en el ruedo haya toros?


Ficha de la corrida


OCTAVA DE LA FERIA DE SAN SIDRO 2022. 

. Toros de El Parralejo, (1º, 3º 5º y 6º),  y un sobrero de José Vázquez  

Curro Díaz, de Corinto y oro. Media estocada caída que provoca vómito (saludos). En el cuarto, estocada baja (silencio). En el sexto, estocada (oreja).

Álvaro Lorenzo, pizarra y oro. Pinchazo, estocada y descabello. Aviso (palmas). En el quinto, estocada. Aviso (oreja).

Ginés Marín, de azul caribe y oro. Estocada (saludos)

 

Parte Médico del doctor García Padros:

Herida con asta de toro en 1/3 medio del muslo derecho con orificio de entrada por cara anterior y con dos trayectorias una ascendente y de 25 centímetros que alcanza anillo inguinal y contusiona arteria femoral y otra trasversal de 20 cm. Que lesiona el recto anterior y presenta orificio de salida en cara lateral del muslo. Es intervenido quirúrgicamente bajo anestesia general y es trasladado al Hospital La Fraternidad Muprespa Habana. Pronóstico grave. Las Vetas . San Isidro 22 4:08  


No hay comentarios:

Publicar un comentario