Toda una época.
Por Jorge Galván Zermeño.
El día de hoy recordamos en esta colaboración la despedida de Manolo Martínez la figura indiscutible de mayor trascendencia en el toreo mexicano, titulé esta columna “Toda una época” por dos motivos, el primero por el tiempo de dominio del Maestro en todos los ámbitos del toreo ya que con pocos años de alternativa se convirtió en el mandón, la segunda razón es un día como hoy de 1982 dice adiós a la profesión en su plaza, La México con un llenazo hasta las banderas o como se dice en La México “hasta el reloj” y fue precisamente con el toro “toda una época” de la ganadería de don Pepe Chafik, en una emotiva y “martinista faena” se cerraba la última y más trascendente época del toreo en nuestro país, la despedida del Maestro provocó un hueco a la fecha sin llenar, ni las buenas formas del Maestro hidalguense Jorge Gutiérrez, ni el resurgimiento de Manolo Mejía o el poder de Eulalio López “Zotoluco” dieron para cubrir el mando y poderío del Coloso de Monterrey, tendría un breve regreso haciendo manifiesto su poderío en este no hubo despedida anunciada solo se fue para unos años después dejar este ruedo de la vida terrena y ocupar su lugar en la historia del toreo.
La anécdota
Hoy es más una recomendación, si usted es afecto a las diferentes redes vea un programa imperdible dirigido por José Ramón Fernández con una entrevista al Maestro Manolo por su regreso, en ella es cuestionado sobre si alternaría con el Maestro Eloy Cavazos, su alternante en buen número de corridas, el anuncio de los dos en un cartel provocaba llenos hasta las banderas, su respuesta fiel a su estilo fue clara y contundente, expuso la oportunidad otorgada a alternantes jóvenes con deseos de ocupar un lugar en la torería, sin ventajas y sin condiciones. Esta promesa estaba respaldada por haber organizado el premio novilleril Cuauhtémoc con un buen número de festejos en la entonces Plaza de toros Torreón y otras más.
Publicado en El Siglo de Torreón
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