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No son las mujeres de Aragua a las que se les muere el muchacho en la barriga como con hechos contundentes lo demuestra Celia Gómez ,“La Carmela”. Lo demuestra en el caso de la plaza de El Calicanto, por ella denunciado y que, por razones ocultas, se mantenía en silencio.
Mejor dicho, en la clandestinidad.
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| EL GALLO FUENTES TODA UNA VIDA FIEL CANCERBERO DE LA MAESTRANZA |
Sin que haya una acusación oficial sabemos muy bien que no hay peor complicidad que el silencio o la omisión. La terrible situación de pulverizar la existencia de la Plaza de Toros Maestranza “César Girón” de Maracay es una noticia que al descubrirse como lo hizo la oferta del ganadero Juan Campolargo al enterarse del penoso estado que hay en la plaza, en la barrera de la plaza de Maracay, es lo que en el viejo periodismo se conoce como “notitia criminis”. Se trata, como su nombre lo indica, y la forma en que nos enteramos, que se ha cometido un hecho que riñe con la ley, que puede ser calificado como delito.
El abandono y el silencio con el que la Alcaldía, el Concejo y la Gobernación intentan tapar su crimen ha sido develado.
Hoy grupos de ciudadanos se han encargado de limpiar el ruedo de la plaza, desmontar el callejón y los corrales del coso taurino, mientras el Coordinador del Patrimonio del Estado levanta un informe con las medidas de las tablas, cantidad y tamaño de las mismas para hacer el cambio donde se necesite y restaurar la barrera.
Ciudadanos que El Gallo Fuentes, ícono de El Calicanto, dirige en las labores de limpieza. Mientras los voluntarios se afanan, la denunciante Celia Gámez “La Carmela” prepara desayunos y almuerzos a los trabajadores que dejan el pelero bajo el inclemente sol de Aragua.
Ciudadanos que El Gallo Fuentes, ícono de El Calicanto, dirige en las labores de limpieza. Mientras los voluntarios se afanan, la denunciante Celia Gámez “La Carmela” prepara desayunos y almuerzos a los trabajadores que dejan el pelero bajo el inclemente sol de Aragua.
Lejos queda aquello de Don Quintín el Amargao *,
que dice:
“El cielo arriba una hornilla;
el circo abajo, una fragua:
el corazón de Sevilla
se está quemando en Aragua.”
* El periodista, escritor y poeta Leoncio Martínez Leo, infatigable luchador por las causas justas y la Libertad de la nación.
Y seguiremos levantando la maestranza. Quisiera ver donde estan los toreros, aficionados taurinos, peñas, fundaciones, no es solo saber y hablar de toros, es el dolor de ver la plaza convertida en un matorral. Me hizo recordar cuando fui de niño a una plaza llamada GUAYABITA. No se podia caminar, se ha perdido el nuevo circo? (Por ahora), pareciera que los mismos taurinos quieren dejar perder la maestranza tambien. Quizas no somos matadores de toros profesionales pero en algun momento nos pusimos por delante de un animal en esa plaza, plaza que nos vio crecer. Ahora digo,dejarias que tu casa se derrumbe sola con el tiempo? Lo mismo pasa con la plaza de toros,es la casa de los toreros, hay que dejar de hablar mucho y hacer mas.
ResponderEliminarGracias por esa nota.
Miguel broy