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Domingo, 21 abril 2019
- El magisterio de El Juli hace historia en Sevilla: indulto, cuatro orejas y Puerta del Príncipe
- Roca Rey y 'Jara', la gran faena de Resurrección en Sevilla
Un año y cinco días después de la apoteosis julista y el indulto del garcigrandeOrgullito (16 de abril de 2018), no anecdótico pero casi menor al lado de la categórica Puerta del Príncipe que coronaba una tarde pluscuamperfecta -dos orejas y dos orejas simbólicas-, El Juli regresa hoy a Sevilla para defender su plaza y su sitio. ¿Para defenderlo de quién? ¿Acaso la Maestranza es del Juli?
Por orden. Viene Roca Rey embalado, al olor de la sangre del viejo gallo, encasquillado en la suerte negada de Valencia y Castellón. Allí donde el peruano del milenio ha triturado las puertas grandes con la insolencia desbocada, la insultante arrogancia desatada en presencia del mandamás. Desde entonces, Juli se ha encerrado en el campo, ha quemado todas las vacas que le quedaban en su finca de El Freixo y ha emprendido una preparación obsesiva con la mente puesta en Resurrección. Sólo en estos últimos cinco días se le ha visto como Correcaminos por Andalucía, en los hatos de Santi Domecq, Núñez del Cuvillo, Carlos Núñez o Cañaveral. Y por tierras salmantinas, en su casa de Garcigrande repetidamente o en los predios del maestro Capea.
El nuevo gallo que pretende el corral tampoco ha parado aunque más moderamente en el campo. Condicionada su preparación, informa su gente, por el mal tiempo, sólo dos tentaderos han jalonado su intensa preparación física diaria, toreo de salón incluido. Roca Rey, en la plenitud de sus 22 años, anda sobrado de confianza vital, valor y sitio. En otra acepción a la del sitio al que verdaderamente aspira: el sitio de El Juli.Que sigue en el machito a sus 36 años, 21 de alternativa.
La voracidad del peruano en esta su incipente cuarta temporada completa como matador amenaza con dejar la dentellada de tiburón blanco en el bestial currículo de El Juli en la Maestranza. Que contesta con datos a la segunda cuestión, aún pendiente, de por qué Sevilla es su plaza: 41 corridas de toros, 33 orejas, 5 Puertas del Príncipe y otras 4 tardes de dos orejas que le colocaron en el umbral lo argumentan.
No sólo por la gloria acumulada, sino por la sangre derramada sobre el albero sevillano, aplasta el historial del viejo gallo la todavía breve hoja de servicios del nuevo: 9 tardes, 5 orejas y una vuelta al ruedo. De las tres cornadas de pronóstico grave de Juli en el coso del Baratillo, la más terrorífica, por la que casi pierde una pierna y la vida, fue la de 2013 frente a un toro de Victoriano del Río que le devastó el muslo derecho.
De Victoriano del Río son, precisamente, los toros del presente duelo de Resurrección, la más preciada fecha de Sevilla. El hierro ahora mismo predilecto de RR. Que cuajó a Jara en este mismo ruedo, en esta misma cita un año atrás, su faena más lenta y honda. De esas que dan prestigio entre tantas y tantas de clamor.
Por sentimiento y también por historial -3 Puertas del Príncipe, un indulto (Arrojado, en 2011), 41 orejas y 11 toros doblemente desorejados- más que por su momento, José María Manzanares, hijo adoptivo de la afición, no puede ser sólo convidado de piedra en la apertura de la temporada de la Maestranza. Siempre fuente de inspiración para su toreo.Levanta el telón el abono más cargado de figuras de los últimos tiempos: entre los tres toreros de Resurrección suman 12 actuaciones, cuatro por cabeza. Como con cuatro cuenta Morante. Que regresará en feria después de un año de ausencia en abril. Su guerra es otra, ajena a la de hoy.
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