50 AÑOS CRIANDO EL TORO BRAVO EN VENEZUELA

LOS ARÁNGUEZ

Toros que pisan el color de su divisa

Foto JESÚS RIERA HERRERA

Por Víctor José López (El Vito)

Los recientes éxitos de la ganadería de Los Aránguez coloca los colores de la ganadería de Carora entre las más importantes de la cabaña brava de América, ocurre cuando conmemora 50 años de haberse fundado en las áridas tierras de Lara, en el Municipio Torres, por un grupo de venezolanos con experiencia de haber enfrentado, con sentido patriótico y nacionalista diversos retos en el campo agropecuario venezolano, muy especialmente  con el ganado lechero.

La gente de Carora alojó en los secos valles de Lara ganado suizo, y atrevidos igual que valientes desarrollaron un tipo lechero que, con el tiempo  se ha convertido en orgullo del ganadero tropical.

Lo mismo ha ocurrido que con el ganado de lidia, sin que los valles de Carora tuvieran nada que ver con las saladas arenas marismeñas los caroreños albergaron al toro bravo para darle el tipo que con el devenir del tiempo marcaría al toro de Los Aránguez.

Hace 50 años vacas que de Las Mercedes fueron a los potreros de los Aránguez, Los Caballos y Copacoa, procedentes del Valle del Cauca y de las serranías de Cali. Aquella vacas llevaban esa sangre revuelta de los tulios con los saltillos y los santacolomas que fueron orgullo del doctor Ernesto González Piedrahita, pionero de la ganadería brava de Colombia..

Fue en 1968 cuando el doctor  Alberto Ramírez Avendaño, en sociedad con los hermanos Alejandro, Raúl, Ramón e Ildenfonso Riera Zubillaga, decidieron hacerse ganaderos de bravo.

 Unidos  antes habían transitado los muchos caminos de la ganadería de engorde, de leche, de la que en Venezuela  calificamos  con orgullo  “Tipo Carora”, 

Fue en 1968 cuando llegaron a los Aránguez las cincuenta vacas del doctor Ernesto González Piedrahita, para ser cubiertas por dos sementales de Vistahermosa, de don Francisco García, uno negro,  de nombre “Banderillo” y otro llamado “Rumbero”. Ambos procedentes de la sangre de Santa Coloma que fue afinando Francisco García en la finca de El Cairo de la Sábana de Bogotá, al igual que los toros “Repentino” y “Almejito” de la ganadería de don Benjamín Rocha Gómez, toro también de procedencia de Santa Coloma.

Hoy esta ganadería que nos llena de orgullo a los venezolanos es coducida por un joven atrevido y entusdiasta que la vuelve a colocar en la marquesina donde ondean las mejores ganaderías de América, me refiero a Jesús Riera Herrera, quien junto as su padre Ramón Riera Zubillaga  con temple, decisión y con intenso sentido de venezolanidad capean temporales y avatares que a cualquiera le habrían aguado el guarapo pero que, a ellos, Chus y Monchito ha servido de punto de apoyo para colocar la divisa verde y grana donde llena de orgullo a la Fiesta de los toros en Venezuela.

LOS ARANGUEZ

Propietario: Jesús Riera Herrera, Hermanos Riera Zubillaga y Jesús Alberto Ramírez Avendaño.

Divisa: Verde y grana.

Antigüedad: 20 de marzo de 1971. Maracay (Aragua).

Localización: Los Aranguez (Lara).

Nombre de la finca: Los Aranjuez.

Procedencia: Fundada en 1968 con 50 vacas de “Las Mercedes”, dos sementales de “Vistahermosa” y dos sementales de Benjamín Rocha. En 1969 agregaron 50 vacas de “Guayabita”. En 1973 importaron 20 vacas y cuatro sementales de los Herederos de Pablo Martinez Elizondo, dos sementales de Francisco Camino Sánchez y dos vacas de “Villar-Vega”. En 1974 agregaron 17 vacas de “Dosgutiérrez”. En 1982 importaron 20 vacas de Joaquín Buendía con 18 crías, de estas 18 crías, 14 eran machos. Ultimamente adquirió semen de la ganadería mexicana de “Garfias”. Lidió por primera vez en Maracay, para tomar su antigüedad: 6 novillos para Carlos Martinez, Joselito Alvarez y Jesús Salermi.