MEMORIA de ARENA se presenta ante BIBLIOFILOS TAURINOS DE MÉXICO y en la ASOCIACIÓN DE MATADORES DE TOROS

MEMORIA DE ARENA

el libro de un camino en el toreo

 

JORGE ANCIOLA, SU EMPEÑO HA CONVERTIDO UN SUEÑO EN REALIDAD

Víctor José López

EL VITO

México, que amanece con bajas temperaturas, se calienta a medida que nos acercamos a la reaparición en el coloso de Insurgentes,  del genial José Tomas. 
Hoy, sábado, a la hora de escribir esta nota no queda un boleto en las taquillas de la plaza Monumental. Se habla, aunque nadie presenta pruebas, que la reventa se apoderó del boletaje. Todo comenzó con la invasión de la reventa a las populares, descendiendo en cascada hasta las barreras. Un tendido en la cima del embudo cuesta regularmente lo que cobran por una “chela” – cerveza. Hoy, ese puesto para las águilas y con buena vista se ha multiplicado muchas veces en su valor y hay quien ha pagado cien veces su valor.
Abajo, en la barrera de sol que Agustín Lara no cambiaba "por un trono" al cambio en dólares puede que sea el precio de una casa.

En medio de esta algarabía, locura que sólo de vez en cuando provoca la Fiesta de los Toros,  se presentará el libro Memoria de Arena, un relato de vida que nació hace 50 años en esta ciudad. Relato que, como se advierte en la introducción, trata el paso por la vida como el jardín de arena que surge en Caracas, en una conversación con el editor Jorge Anciola y en el que para poder expresar lo que entendemos por evolución del toreo recurrimos a la metáfora del jardín de Ryoanji, donde según la enseñanza de los monjes Zen siempre habrá una roca que no seremos capaces de descubrir. Así es la Memoria taurina, que en el caso de este libro son los recuerdos de un Reportero que tuvo entre muchos regalos en su vida el haber nacido  en Caracas y haber sido testigo de los mejores momentos de la fiesta de los toros en Venezuela.

Hoy, a la distancia de los acontecimientos pero cerca del teatro y escenarios de los hechos, México generoso y siempre abierto para nosotros nos abre las puertas para la edición de este libro.
 Hay en Memoria de Arena desvestido del rigor de la crónica informativa, el relato testimonial para la admiración de una fiesta y de la amistad, es un homenaje  a la amistad, a la fiesta de los toros y a la grandeza del toreo.

El miércoles la directiva de Bibliófilos Taurinos de México nos recibirás para oficialmente introducir el libro en la bibliografía mexicana. Más tarde, el jueves en horas de la tarde presentar el libro a los lectores en la sede de la Asociación de Matadores de Toros en el Salón “Silverio Pérez”, un nombre que es más que la distinción de un ídolo de la fiesta sino que representa el sentido artístico que del toreo es capaz de expresar un pueblo, una raza, una época que en Memoria de Arena está representada en amplitud.

Vale en honor a la justicia, reconocer y agradecer los nombres de tres motores que echaron a andar un carro que ayer fue un sueño y hoy una realidad: Jorge Anciola, Arturo López Negrete “El Bardo de la Taurina” y el matador de toros Alfredo Gómez “Brillante”.

A la misma hora, el mismo día y en la misma Ciudad de México se presentará un libro sobre el gran José Tomás, el torero más taquillero del momento. No competiremos con este gran personaje, simplemente coincidiremos. 
Con Tomás muchos admiradores, nuestra compañía será de amigos de toda la vida, testigos todos de aquellos sueños que hoy sembrados en un jardín de arena  pondremos en las manos de los lectores de la historia de la más hermosa de las fiestas.

Hoy el libro se presenta en México, dentro de poco será en la muy querida Caracas que sus páginas se reencontrarán con calles y recuerdos que forjaron esa Memoria de Arena.