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El Capote de Paseo que
perteneció al maestro Luis Sánchez Olivares, “Diamante Negro”, guardado en la
Basílica de Santa Teresa en Caracas. La misma iglesia donde se encuentra nuestro
venerado Nazareno de San Pablo, protector de nuestra agredida y adolorida
Caracas.
La imagen de la milagrosa patrona
de Venezuela, Nuestra Señora de Coromoto, fielmente reproducida por este gran
fotógrafo convertido en Notario Gráfico de la Historia del Toreo en Caracas, Alejandro
Vielma es un documento fehaciente de lo que la Fiesta de los Toros representa y
significa en la historia y en la cultura venezolana.
Esperamos que con este
capote, este fin de semana en Tovar donde se reúnen los taurinos para declarar
una cruzada en “defensa y protección de la Fiesta de los Toros en Venezuela”, le
hagan un quite a los demonios que en las entrañas del toreo nacional son sus más
fieros depredadores.
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