DE “EL GUERRA”, por el camino de Los Amigos del Toro, a la tertulia del Country Club de Valencia

Guerrita y su cuadrilla


EL VITO

La Tertulia fue en la Caracas de los años setenta, cuando creció Meridiano y nacieron las peñas taurinas regadas por Maracay, Valencia y los graderíos del Nuevo Circo, un sitio donde se desmenuzaban la política, el beisbol y los toros.
Al amparo de esta condición nació allá por 1971 en El Mesón del Toro la más famosa de todas las tertulias taurinas que han existido en Venezuela, Los amigos del toro.
Hoy, es por condiciones de la inseguridad del país y de la ciudad, una tertulia itinerante. Aunque sus contertulios son los de siempre, el sitio se mueve.
Ayer en la tertulia de Los Amigos del toro el grupo, que integraron Tobías Uribe, Alberto Ramírez y Jesús Nieves, recordaron las cosas de Rafael Guerra “Guerrita” por haberse cumplido el pasado 21 de febrero otro aniversario de la muerte del genial cordobés. Setenta y un años de su partida; y porque Manuel García, destacado taurino venezolano radicado en España, quien estuvo en Mérida durante los días de los festejos de la Feria del Sol, nos obsequió con la obra de Rubén Amón “No puede ser, y además es… ¡imposible!”. Frase esta de “Guerrita”, cuando le informaron que -Belmonte “j´a” roto con las reglas del toreo, “pue, j´a realizao” la proeza de “da sais” verónicas y la media sin enmendarse. "Rafaé" de mi “j´arma”
“Guerrita” respondió: - Tu “esta bebio”... Eso no “pue sé” te lo dice Rafael Guerra Bejarano.
Cuenta Rubén Amón que semanas después fue Rafael a la plaza sevillana a ver a Juan; éste repitió la misma faena, a lo que El Guerra comentó posteriormente: -“Pue” sí puede "sé"¡pero no “pue sé”!. Porque lo que no “pue sé” además es...¡imposible!
No le entraba en la cabeza al maestro lo que había visto. No llegó a captar que Belmonte había traído a la lidia una auténtica revolución. Este comentario realizado en el Club Guerrita lo terminó el califa diciendo una de sus sentencias: - Ve pronto "j´a" verlo que ese es carne de "matadero".
Por suerte no se verificó el lacónico dicho del Guerrita.
Rafael Guerra “Guerrita” es la gran figura del toreo que construyó un puente entre la maravillosa época de Lagartijo y Frascuelo, y la Edad de Oro del toreo de Joselito y Belmonte. Unir esos dos senderos de la técnica, el arte, el toreo en esencia necesitó de cambios muy radicales en un elemento primordial: el toro de lidia. El toro de la época de Lagartijo era distinto al de Gallito y diferente al toro heredado por la Fiesta ya ido Belmonte de los ruedos.
Viene al caso recordar a Guerrita y su tiempo, a Guerrita y su herencia por los duros días que vive la Fiesta de los Toros en Venezuela, y en el mundo ante “la moda” del anti taurinismo, revestida de una patena de antropomorfismo.
No, no se llegó a la profundidad del tema. Más bien se invitó para el coloquio del próximo sábado en el Country Club de Valencia, en Camoruco, en el que disertará por invitación del doctor Rafael Enrique Casal sobre el tema de las grandes transformaciones que han ocurrido en el camino de la fiesta. Cambios provocados por la unión de un torero, de un toro, en un sitio determinado y ante un público privilegiado.
Estaremos en compañía del gran aficionado Vicente Lozano Rivas el próximo sábado en Valencia, en horas de la noche, y esperamos contar con su presencia.