Manzanares, en la Maestranza
ANDRÉS AMORÓS
Después de un mes prácticamente seguido de festejos en Las Ventas, se imponen algunas conclusiones.
1.- Aunque suela negarse, en la Fiesta hay bastante lógica. Se producen sorpresas, siempre hay un margen imprevisible pero, habitualmente, las cosas salen mejor si se preparan bien que si no se hace así. Este año, todos sabemos que la Feria de San Isidro tenía mejores carteles y la del Aniversario, peores: así ha sido el resultado de las dos.
2.- Al hablar de mejores carteles, solemos referirnos a los diestros, no a los toros. Ya advertimos que el panorama de los toros anunciados nos daba más miedo. Por desgracia, los temores se han confirmado, en varios aspectos: muchos toros han sido rechazados en los reconocimientos, sobre todo (pero no exclusivamente) cuando llegan las figuras; ha bajado el nivel de presentación, de trapío; lo que es peor, han escaseado demasiado los toros bravos. Aducen algunos que ha habido toros propicios para el triunfo que se han desaprovechado. Es verdad. Pero también lo es que la mayoría de esos toros eran de los que «se dejan», suaves y nobles, no de los auténticamente bravos. La prueba: la dificultad para encontrar toros premiables, que ha llevado a decisiones muy discutibles...
3.- El número de puertas grandes abiertas por los toreros ha subido bastante este año: Manzanares ha confirmado que es ahora la gran figura; Talavante se ha incorporado al grupo de cabeza con su toreo al natural; César Jiménez ha recuperado su puesto... A su lado, Morante no ha tenido fortuna pero demuestra siempre que puede cambiar todo con unos lances. Aunque algún sector no lo acepte, El Juli sigue dando lecciones de técnica (y también de responsabilidad: es el único, entre las figuras, que acude dos tardes a la dura Feria de San Fermín). La revelación indiscutible, por valor y guapeza al matar, se llama Iván Fandiño.
4.- Ha sido un acierto la apuesta por los diestros mexicanos: todos ellos, matadores y novilleros, han pasado la prueba con valor y dignidad.
5.-Entre los novilleros, han destacado Víctor Barrio, Sergio Flores y Rafael Cerro. (Se ha equivocado Juan del Álamo no acudiendo a Madrid,en vísperas de su alternativa).
6.- Los rejoneadores siguen garantizando un espectáculo brillante y muy rentable. Han abierto la puerta grande Diego Ventura y Leonardo Hernández, mantiene su magisterio Pablo Hermoso de Mendoza.
7.- La llamda Feria del Aniversario, separada pero pegada a San Isidro, no tiene ya razón de ser.
El resumen es muy claro: al margen de Ponce y José Tomás, que no pelean en esta guerra, las figuras indiscutibles son Manzanares, El Juli y Morante; se incorpora a este grupo Talavante. De ellos a los demás, va demasiada distancia.
Lo más preocupante: la situación de las ganaderías. Deberían reflexionar de verdad sobre ello, hacer examen de conciencia y propósito de la enmienda todos los sectores profesionales implicados: además de los ganaderos, las figuras del toreo y sus apoderados, los veedores, empresarios, veterinarios y Presidentes.
¿Confiamos en que lo hagan?...
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