Sangre brava pura española se perfila como alternativa EMBRIONES ENCASTE SANTA COLOMA PREPARAN TRAER A VENEZUELA

A través de la FIV de Embriones se abre una nueva ventana para el renacer del toro de lidia en Venezuela, con la garantía y seriedad que exige el aficionado.
1.- Interesante panorama se presenta para nuestra sangre brava venezolana, tras la apuesta de la Fertilización In Vitro de Embriones, de los principales encastes españoles que han sembrado fiesta brava en nuestro país.




A través de la FIV de Embriones se abre una nueva ventana para el renacer del toro de lidia en Venezuela, con la garantía y seriedad que exige el aficionado.



Rubén Darío Villafraz

Ante la grave crisis que afronta desde hace varios la cabaña de toro bravo en nuestro país, un alentador panorama se asoma en el horizonte, tras los trabajos y gestiones que en suelo español se viene realizando para refrescar la sangre brava de nuestras principales camadas en un futuro no muy lejano.
En este caso, el Veterinario sevillano Francisco Escribano es uno de los artífices de lo que podría ser un revulsivo a la exigua realidad que muestran nuestras ganaderías nacionales, diezmadas varios lustros por los altos costos que implica la traída de vacas y sementales, así como los engorrosos problemas sanitarios y ambientales que implica el trópico para el ganado vacuno y su posterior adaptación al medio en el que se encuentre.

Explica Escribano que para tal efecto, para finales del mes de enero del año próximo se tiene preparado el primer lote de 15 vacas, del hierro de Javier Buendía, procedencia Santa Coloma, el cual ya han sido estudiadas bajo la severa lupa del tentadero en el campo, analizadas en el laboratorio para comprobar su fertilidad y capacidad reproductiva, y finalmente aprobadas para su posterior extracción de óvulos en su distintos ciclos de “celo”, que luego en el laboratorio, bajo el formato de Fertilización In Vitro, se fecundaran con semen de toros a los cuales ganaderos apuestan firmemente en llevar en una gran probabilidad notas altas en su posterior selección como lo será su lidia en el ruedo o en la plaza de tienta.
Específicamente este primer lote de vaquillas están en el Centro de Reproducción Bovina denominado Sani-Lidia, situado en Talavera de la Reina, donde se encuentra toda una referencia en materia de genética y fertilización bovina del toro de lidia, como lo es el MV Antonio Gómez Peinado, quien así mismo de conocer ampliamente el extenso campo bravo español, es catedrático de la madrileña Universidad Alfonso X El Sabio. Peinado a su vez se encuentra rodeado de varios colegas el cual forma y especializa en este ámbito, unos de ellos son los hermanos Alberto y Román García, quienes vienen de vena taurina, pues su familia es la encargada de llevar el hierro que llevan a nombre de Román Sorando Herranz, astados por cierto, el cual en el año 1983 fueron lidiados en suelo venezolano, específicamente en la arena de la Plaza de Toros de Mérida.
Bajo la amplia experiencia del MV Antonio Gómez Peinado, ratificado en el manejo sanitario y genético de hierros propiedad de personajes como “Joselito, El Ventorrillo, Juan José Rueda (vía Sotillo Gutiérrez) y Fernando Domecq Solís, es que Francisco Escribano apueste por dar esa oportunidad a los ganaderos venezolanos de resembrar lo que una vez fue el campo bravo venezolano, labor nada fácil por demás, en virtud de los mencionados altos costos que atañe dichos estudios y posterior seguimiento de los animales.
En el caso especifico del que trata esta entrega, ya comentamos que los primeros embriones fecundados serán traídos a finales de enero, para luego, en termos criogénicos debidamente certificados y bajo el asesoramiento técnico de Gómez Peinado y los hermanos Alberto y Román García, sean traídos por medio de la línea aérea Santa Bárbara a tierras de la costa valenciana, específicamente a Tucacas, sitio donde ya tienen del mismo modo preparadas las vacas lecheras que serán las receptoras de los embriones y de esta manera esperar el ansiado periodo de gestación, para los cuales se contará con el valioso aporte de los futuros ganaderos de bravo, Raymundo y José García, quienes apuestan seriamente por un proyecto viable si tomamos en cuenta las facilidades que ofrece los avances en materia veterinaria en los actuales momentos, no quedándose cortos en todo lo señalado en estas líneas, pues el cometido es poder traer a estas tierras embriones de ejemplares cuyos encastes sean de amplio abanico para demás ganaderos venezolanos, como es el caso de Domecq, Núñez del Cuvillo, Jandilla, entre otras.





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¿QUIEN ES ANTONIO GÓMEZ PEINADO?

Actualmente hablar de materia genética del toro de lidia tiene un referente específico. Se trata del MV Antonio Gómez Peinado, hombre ligado al mundo de la medicina veterinaria de alta tecnología, desde hace aproximadamente 21 años, quien nos relata sus comienzos. “Empecé trabajando para los hermanos Lozano y entonces las cosas que hoy se hacen” eran inimaginables. A la pregunta de si le trataban por loco cuando proponía cosas parecidas por las que ahora le aplauden, la respuesta es clara: “claro que ocurría”.
Deja en claro Gómez Peinado, “José Luis quería inseminar unas vacas con unas dosis que le había regalado Álvaro Domecq y necesitaban un veterinario que supiese hacer esas cosas. A mí me llamaba mucho la atención el toro de lidia. Era una parte de nuestra profesión que estaba sin explorar. Llegaba de la universidad en la que había estado investigando con el tema de embriones y gracias a esos conocimientos empecé a trabajar”.
Hoy en día, tras rodar durante más de cuatro lustros las principales camadas de toro bravo en España, Gómez Peinado tiene su centro de estudios propios en lo que ha denominado Sani-Lidia, situado en Talavera de la Reina, donde comparte su conocimiento del toro de lidia con una vasta camada de colegas, el cual forma y entrena para lo que son actualmente los retos y papel protagónico del medico-veterinario en el campo bravo.



FECUNDACIÓN IN VITRO

La fecundación in vitro (FIV o IVF por sus siglas en inglés) es una técnica por la cual la fecundación de los ovocitos por los espermatozoides se realiza fuera del cuerpo de la madre. El proceso implica el control hormonal del proceso ovulatorio, extrayendo los ovocitos de los ovarios maternos, para permitir que sean fecundados por los espermatozoides en un medio líquido. El ovocito fecundado (el cigoto) se transfiere entonces al útero de la hembra con la intención de iniciar un embarazo.
Para que un tratamiento de FIV tenga éxito, es necesario disponer de ovocitos sanos, espermatozoides que puedan fecundarlos y un útero que pueda mantener una adecuada gestación.
Los laboratorios especializados en FIV han desarrollado métodos de puntuación para juzgar la calidad de los ovocitos y los embriones. Típicamente, los expertos examinan la simetría del embrión, la integridad estructural de sus células y el crecimiento general entre dos y cinco días tras la fecundación.
Normalmente, los embriones que han alcanzado el estadio de 6-8 células se transfieren 3 días después de la extracción. En ocasiones, sin embargo, los embriones se mantienen en cultivo por un periodo más largo (unos 6 días), y la transferencia se realiza en el estadio de blastocisto, sobre todo si se observan muchos embriones de 3 días de buena calidad.