domingo, 12 de septiembre de 2010

ORELLANA POR LA PUERTA GRANDE EN TOVAR



Rafael Orellana se reencuentra con el triunfo en su lar natal, tras aprovechar las opciones de triunfo del único toro que se dejó en la segunda de feria





Rubén Darío Villafraz
rubenvillafraz@yahoo.com

TOVAR (Enviado Especial).- La corrida del sábado tiene varias lecturas. La primera, la excelente entrada que se preveía registrar, a razón del único cartel que en cierta parte tenía “tirón de taquilla”. La segunda, la posibilidad de ver las condiciones de tres toreros que llegaban en distinto momento artístico. Así mismo, estaba el aliciente de observar toros de una de las ganaderías que en cierta parte son garantía de éxito en nuestra muy limitada cabaña brava venezolana.

Pero la historia se cuenta de otra forma. El encierro de los tres hierros que tiene en su poder la familia Molina Colmenares ha dejado en el debe una mejor tarde de toros. Escasos de fuerzas, discretos de presencia, doliéndose en el castigo, midiéndosele en demasía para que pudieran llegar con algo de motor al tercio final, los astados corridos en su mayoría fueron protagonistas de una tarde anodina y de matices escasos.

Vanegas ha dejado en sus trasteos el porqué de su veteranía. En su muleta pasó con propiedad las flojas y rebrincadas embestidas del que pechó en primer lugar, luego de haber realizado un tercio de banderillas de escasa relevancia. Al final el toro se rajó, y lo poco que hizo Vanegas lo supo hacer con autoridad en el ruedo. El pinchazo hondo y el bajonazo que recetó le dejaron en silencio su labor, la misma que tuvo un poco mayor de eco frente al cuarto, animal que en cierta parte prometía algo más de emoción, pero que se fue diluyendo ante el escaso recorrido del ejemplar. Dos pinchazos hondos, antes de nuevamente dejar una estocada baja, para ser silenciado.

Tras confirmarse que Barrera sería trasladado a un centro clínico de la ciudad, le correspondería pasaportar el que cerró plaza. Alegre fue el saludo con el percal, para luego compartir emocionante tercio de banderillas junto a Orellana, en dos pares de vibrante ejecución. En la muleta, el inicio rodillas en tierra en los medios sería el prologo a una faena que al igual que las demás del festejo se fueron diluyendo ante el corto y descompuesto recorrido de la res. Intenciones hubo por no irse de vacío, pero una cosa es lo que propone el torero y otra la forma como lo descompone el toro. El pinchazo antes de dejar una estocada ligeramente desprendida, para ser silenciado.

Orellana tuvo la suerte en forma de cara y cruz, en este caso de corresponderle el toro de menos juego, como fue el berrendo segundo y el más armónico quinto, ambos diametralmente opuestos. Con su primero, se fajo Rafa desgranar una labor atropellada, valerosa y de mucha entrega, pero escasa de contenido artístico. Solventó la papeleta con decoro, luego de pinchar en el primer viaje, para dejar estocada entera, recibiendo leves palmas. Con su segundo, se encontraría con las embestidas de mayor trascendencia del lote enviado por Hugo Domingo Molina. Lo seria ante «Rujanero» Nº 9 de 430 kilos donde se evidenciaron los momentos más artísticos de la función, en especial cuando Orellana dispuso correr la mano por el pitón izquierdo, en dos series donde rompió la plaza en clamores frente a lo hecho por el paisano. Supo darle los tiempos y medida a una faena que supuso la emoción y justificó la ilusión de los asistentes ayer. El pinchazo hondo que recetó para luego rematar con golpe de descabello certero, le valió la concesión de las dos orejas, pedidas con fuerza por el publico, el cual remolonamente Don Oscar Labrador concedió, a sabiendas que el contenido de la faena era para una, pero había por encima de todo, que justificar la corrida, por todos los medios.

Antonio Barrera pasó y no paso por Tovar. Ya lo habíamos mencionado de sus limitadas condiciones físicas que esta atravesando el sevillano espada, quien salió al ruedo infiltrada su rodilla derecha. Precisamente una gastroenteritis aunada a una deshidratación severa y vértigos hizo que solo despachara el que fue tercero. Ante este, voluntad y valor seco se vio relucir el mencionado espada, quien no contaría con mucha tela donde cortar, frente al bravucón y a menos ejemplar, que despachó de soberbio espadazo, sin puntilla, el cual agradeció con leves palmas el soberano.



FICHA DEL FESTEJO
Plaza de Toros Coliseo El Llano de Tovar.
Sábado 11 de septiembre de 2010
II Corrida de la Feria de Virgen de Regla.

Con casi lleno en los tendidos, en tarde fría, ventosa con lluvia a partir de la lidia del 3º toro del festejo, se han lidiado tres toros de EL PRADO (4º, 5º y 6º) dos de RANCHO GRANDE (1º y 3º) y uno de LA CONSOLACIÓN (2º) todos hierros propiedad de la familia Molina Colmenares, en su conjunto discretos de presentación, descastados, con limitado recorrido y fuerzas, el mejor del envío el corrido en 5º lugar, bravucón, que a la postre fue el que más se dejó.
Pesos: 435, 449, 435, 453, 430, 425

CÉSAR VANEGAS
(Azul Marino y oro)
Leves palmas, silencio y silencio.

RAFAEL ORELLANA
(Celeste y oro)
Leves palmas y dos orejas

ANTONIO BARRERA
(Blanco y oro con remates negros)
Silencio en el único que estoqueó

INCIDENCIAS: Destacaron en las banderillas Salvador Moreno en un extraordinario par en el 2º. *** Barrera pasó a la enfermería donde fue atendido tras presentar marcado cuadro de deshidratación producto de una gastroenteritis, así como vértigos, motivo por el que fue trasladado a un centro asistencial de la ciudad para su estabilización.

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