EL NUEVO CIRCO EN LA HISTORIA (5) ADORACIÓN A MANOLETE, Y EL IDILIO CON LUIS PROCUNA por Víctor José López EL VITO

 “MANOLETE”

Manolete y Arruza, una época, una tarde, ídolos de la afición venezolana.

Cuando el nombre de ‘Manolete’ ocupaba los altares de la Fiesta por el mundo, se anunció en Maracay su presentación para dos corridas de toros organizadas por Andrés Gago. Hubo la intención ,que antes se presentara en el Nuevo Circo; pero las autoridades taurinas del Distrito Federal no autorizaron las reses de Guayabita porque no reunian el peso mínimo ni el trapío los ejemplares seleccionados para la presentación del ‘Monstruo’ en Venezuela. 

Andrés Gago, enamorado de Venezuela y consciente de lo que significa Caracas solicitó el permiso para presentar a Manuel Rodríguez ‘Manolete’ en el Nuevo Circo luego del éxito alcanzado en Maracay con la temporada de Arruza y Manolete. 

Em Caracas se presentó en un festival el 19 de mayo de 1946.

A través de sus 100 años y permanente actividad taurina en el Nuevo Circo se han celebrado muchos y muy importantes festivales, pero aquel de ‘Manolete’ fue trascendental por su significado y porque cuando aún con el sabor de lo disfrutado en la arena, fue que la tauomaquia vivió en la ciudad.

El festival se celebró a beneficio de la Campaña Nacional de Alfabetización, con novillos de Guayabita. El cartel estuvo integrado por Rafael Vega de los Reyes ‘Gitanillo de Triana’, ‘Manolete’, Julio Mendoza y los hermanos Óscar y Ricardo Martínez. Este festival fue el adiós de ‘Manolete’ a Venezuela y su despedida de América porque a dos meses y días la muerte le esperaba el pitón izquierdo del toro ‘Islero’ de la ganadería de Miura en la plaza de Linares cuando el cordobés murió matando.Los caraqueños  sufrieron del impacto de su trágica muerte en Linares, y para manifestarlo colocaronn aficionados y Autoridad una placa manifestado admiración y respeto por el gran torero, asó Manolete no hubiera toreado de luces en la arena de San Agustín.

IDILIO PROCUNA Y CARACAS

Luis Procuna, ídolo de la afición de Caracas, entre dos grandes taurinos y buenos amigos: Luis Ernesto Navarro y Florencio Gómez Nuñez.

En diciembre de 1946 la empresa de Alejandro Arratia Oses, hombre de radio y de mercadeo muy ligado a la Fiesta, presentó la primera corrida de la Temporada con toros mexicanos de La Trasquila. Contrató a un grande en la historia taurina criolla, Julio Mendoza, que en su reaparición en el Nuevo Circo cortó tres orejas y rabo. Luis Procuna estuvo fatal, escuchando broncas del público y trompetazos de la autoridad viendo irse un toro al corral. Aquella tarde el  ‘León de León’, el recordado Antonio Velázquez estuvo voluntarioso. 

Para la segunda corrida, el 15 de diciembre, también con toros de La Trasquila y de Guayabita, el mexicano Luis Procuna se convertiría en ídolo de la afición de Caracas, y por muchos años, gracias a su triunfo sin precedentes en Caracas. 

El ‘Berrendito de San Juan’ cortó las dos orejas, el rabo y una pata del bravo y noble  ‘Caraqueño’ de La Trasquila, tras una emotiva y muy original faena rematada con soberbia estocada. Desde aquel 15 de diciembre de 1946 Caracas tuvo un torero que solo otro Luis superaría en afecto e idolatría, Luis Sánchez Olivares ‘Diamante Negro’. Procuna alternó aquella con Antonio Velázquez y Julio Mendoza.