PACO AHUMADA por Manuel del Prado “El Triste”

LOS MAESTROS MARIANO RAMOS Y PEPE LUIS VASQUEZ  DISFRUTAN DEL MULETAZO DE PACO AHUMADA EN LA ARENA DE LA PLAZA MÉXICO

Por Manuel del Prado
"EL TRISTE"

Correrían los años 1968, cuando toreaba con frecuencia un novillero llamado Paco Ahumada. Sonaba ese nombre torero. Hay nombres con impacto, que se quedan grabados, del de Paco Ahumada ha sido uno de ellos. Lo conocí a Paco Ahumada en el Bosque de Chapultepec. Era un muchacho muy respetuoso, serio y entrenaba muy bien de salón. Confieso que no tuvimos contacto cercano, y así pasaron varios años. Paco toreaba sus novilladas y yo empecé a soñar toreando.

Habrá sido un par de veces las que nos saludamos y siempre me dejaba la impresión de ser un amigo chipen. Atento, fino y con estilo de persona con calidad humana y clase de la buena. No recuerdo cuantos años hacen de la última vez que lo vi. Fue en el Hotel Camino Real de Polanco. Aquel día nos encontramos en el lobby del hotel. Él en compañía del matador Gilberto Ruiz Torres. Torero con el que tengo fraternal amistad. Platicamos un buen rato y nació una empatía entre Paco y yo. Nos despedimos dándonos un abrazo y prometiéndonos que pronto nos llamaríamos para seguir platicando, cosa que no ocurrió… en fin.

En días pasados, el jueves 26 de marzo del presente año para ser preciso, charlando con el matador Jorge Ávila me dijo que estaba muy decaído, pues un gran amigo de él ,acababa de fallecer. Se refería Jorge a Paco Ahumada, fallecimiento que no me había  enterado. Le comenté a Jorge que  conocía a Paco y que lamentaba su fallecimiento. El matador Ávila me informó de los pormenores de su deceso y  comentaba que habían sido grandes amigos que,  meses antes,  el Jorge Ávila, había escrito anécdotas de hechos que ocurrieron en sus tiempos de novilleros. La verdad yo solo tengo buenos recuerdos de Paco Ahumada, y aunque no tuve tiempo de tratarlo a fondo, me parece oportuno que quien lo conoció y trato nos permitiera conocer a este personaje que conquisto amigos por su formas de ser, por eso  aquí les dejo esta semblanza del matador Jorge Ávila, comentando y recordando a nuestro queridísimo amigo torero como lo fue Paco Ahumada, a quien le agradezco su amistad que me brindó y el ánimo que me dio cuando escribía mis textos, manifestándome que le gustaba la forma que los redactaba y viniendo de su persona, créanme que me sentía sumamente alagado y agradecido por sus palabras.
La última vez que tuve contacto con él fue el día primero de marzo, pues me mando una felicitación por ser día de mi cumpleaños, y como él nació en el día 10 de marzo, le mande felicitar diciéndole que nos estábamos tardando en tomar el café de hace mucho tiempo prometido, desconociendo que ya no pudo leer el mensaje pues su estado físico ya estaba muy decaído y más tarde falleció. Les dejo este escrito del matador Jorge Ávila, que pinta a todo color al gran amigo y torero Paco Ahumada.

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FRANCISCO AHUMADA VASCONCELOS

Falleció mi amigo Paco Ahumada quien fue como un hermano más, para mí. Lo conocí en el año 1968, cuando llegué a radicar a México para hacerme Torero.

Paco, por ese entonces ya toreaba profesionalmente vestido de luces, como novillero, en contra de los deseos de sus padres, por lo que alternaba el tema taurino, con sus estudios de derecho en la UNAM, y después con diversos negocios en qué participo como empresario, sin embargo, él siempre hubiera querido, dedicarse plenamente a torear. Su familia tenía una sólida posición social, cultural y económica. Era nieto del insigne José Vasconcelos, quien, entre muchas otras importantes actividades y sucesos en su larga y brillante biografía, siendo rector de la UNAM (Universidad Nacional en esa época), creo la frase; -Por mi Raza hablará el Espíritu- que a partir de entonces se convertiría en lema de la máxima casa de estudios de México, donde años después, estudiaría leyes su nieto Francisco.

Fue muy apreciado en el mundo cultural, social y taurino tanto en México como en otros países como España o Italia, donde tuvo grandes amistades que valoraban su vasta cultura y sus finas maneras

El extraordinario ganadero Don Luis Barroso Barona, fundador de la ganadería de Mimiahuapan y toda su apreciable familia lo consideraron siempre como un miembro más de la misma, de manera que, en las faenas de tientas del ganado bravo de esa gran casa ganadera, pudo siempre dar rienda suelta a su sensibilidad torera, emocionando sin cuentos a la familia Barroso Díaz y a sus invitados. Fue amigo, muy apreciado por los Toreros, de manera muy especial, por Chucho Solórzano y Mariano Ramos quienes celebraban siempre públicamente su amistad.

Una temporada, que me quedé sin lugar donde vivir, Paco amablemente me ofreció su casa familiar de Tlacopacle en el Sur del entonces Distrito Federal, en la esquina de la calzada de las águilas con la calle leones. Había una enorme Biblioteca y detalles de arte en toda la casa, entre ellos, ...un bar, donde se reunía la familia al medio día, le llamaban Al Toro Pintado, y esto era porque en la pared del fondo, había una figura de un toro, que había sido pintado en tinta por don Herminio, papá de Paco, un hombre singular con el don de la creatividad poética a flor de piel. Sonorense, gran amante del Bacanora de su tierra y del italiano Campari que mezclaba con agua de sifón, bebidas ambas, que, entre algunas otras, aprendí a degustar en ese emblemático y mágico lugar.

Años después en la barda del jardín donde florecían unos rosales, me tocó ver a Don Herminio pintar con crayolas de sus nietos, en medio de los denuestos de
Carmelita su mujer, el rotundo verso de Pellicer “Aquí no suceden cosas de mayor trascendencia que las Rosas “

Este miércoles 25 de marzo de 2020, a mi hermano Paco, le llevo a otra vida, un cáncer avanzado, que le venía últimamente produciendo dolores muy intensos. Paso sus últimos días con su familia en la casa de María su hermana, en Cuernavaca, ella me comentaba al día siguiente del deceso, que en todo momento estuvo siempre presente y tranquilo.Era un convencido de su fe católica y ferviente creyente de la palabra de Cristo Jesús.

Extraordinario Ser Humano, empresario emprendedor y creador de empleos. fue propietario del restaurante El Abajeño de la colonia Narvarte en la Ciudad de México, poco tiempo después de incursionar en esta actividad instauró con muchísimo éxito una sucursal en Aguascalientes, en los terrenos de la Feria de San Marcos. Por otra parte, participó como socio fundador de una empresa en el ramo de la señalización a nivel nacional, todo esto, sin olvidar que ante todo siempre se sintió Torero.

Cuando se ponía delante, dejaba constancia de sus clásicas maneras para interpretar el arte de torear.

Descanse en Paz, Francisco Ahumada Vasconcelos.

Jorge Ávila

Cancún marzo de 2020

Paquito, solamente te nos has adelantado, un abrazo esperando te llegue a donde te encuentres ¡¡...

Manuel del Prado “El triste”
Desde la Ciudad de México
27 de abril 2020