Sin lugar a duda la falta de una *figura y más aun de un *ídolo en la arena, de un *líder totalitario en los tendidos, la atracción de una fiesta interesante, la carencia de sagacidad y la tolerancia a conveniencia empresarial, la falta de aplicación de las autoridades, la tibieza de los medios, han hecho que la Fiesta de lo popular, pase a lo lastimoso, volviéndose caldo de cultivo pa’ que legisladores de nula monta en su papel de exhibicionistas y fantoches que se agarran de lo que sea pa’ pintarse de colorete la jeta bajo las mil máscaras de la hipocresía defensora de lo que no hay que defender sino cuidar, que es la cultura y el arte, comenzando con la rectora, luz de la política, hoy blandengue y desorientada, secuestrada, por decir lo menos que en realidad no es inexistente sino nefasta.
(* Va un ejemplificación de lo que se debe de entender por figura e ídolo; En una ocasión en la antesala del despacho del Regente de la ciudad aguardaba el maestro Agustín Lara para ser recibido, cuando se abrió la puerta de la oficina y de ella salió “El Califa” Don Rodolfo Gaona, al verlo el músico de los pasosdobles solicitó una hoja de papel pa’ que en ella el “Petronio” le estampara un autógrafo, ¡un gigante admirado ante otro!), / (*como lo fue el porrista de la UNAM “Palillo” en el americano que movía las masas dentro y fuera de los estadios y su influencia era tal que gozaba del derecho de picaporte en la Presidencia de la República)
Lo que está padeciendo la Fiesta Brava es tan patético que ha llegado al extremo de que se le tenga que defender, cuando lo que se debió haber hecho es cuidarla en el mejor y más amplio de los sentidos, no nos hagamos tarugos a la tradición, que eso es la Fiesta, no se le dio mantenimiento y ahora está convertida en una vecindad que ha sido tomada por los porros malvados que son algunos de adentro plenamente identificados en las cúpulas y en los tentáculos de los despachos que por un peso ahorrado o ingresado, un brochazo de poder, mimos a determinados toreros a los que en casos se les maquila la bobería o descastamiento de las reses y de las edades que los libros de nacencia lo digan, digámoslo claramente, a la Fiesta se le han mermado sus reservas y si a eso le sumamos los paracaidista conocidos como anti taurinos que usan a los políticos o viceversa pa’ llevar agua a su chiqueros no a sus molinos que en eso están convertidas las cámaras legislativas, pues ahí están los resultados.
Porque son los regidores y los antis los que cada vez con más frecuencia la empinan y la violan como ahora está pasando en Quintana Roo, porque privarla de sus derechos empezando por el de la conservación es violar su legítima costumbre a expresarse, e insisto ¿Por qué defenderla? Cuando lo que se debió de hacer en términos llanos desde endenantes es buscar elevarla al derecho de la intocabilidad, blindarla, arroparla bajo el Escudo Nacional, que bien puede proteger las tradiciones, de un país desmoronado pero que todavía entre las entrañas sangrantes balbucea la esperanza de que sus valores, incluso históricos, la mantengan con la ilusión, no de una lenta agonía sino de una vida segura.
*De Sol y Sombra. ‘Prohibición en Quintana Roo: No lloremos lo que no supimos defender’, por Luis Cuesta.
¡Caramba! Como es posible que entre tantos toreros no salga, ni se vislumbre uno en la inmediatez como, José Tomás o Andrés Roca Rey, que hagan que los que están afuera, los externos, las masas volteen a verlos con interés, ¿se imagina usted una Feria de la CDMX, con esos toreros montándose en una fecha atrayente como lo pudiera ser el día de la hispanidad? Y que nadie me cuente que “Pepe Tomy” no vendría, claro máxime que acaba de dar una muestra fehaciente en Granada de que está atravesando por una época de vacas flacas, si no fuera así no hubiese aparecido con la aspiradora de eurodólares en la espuerta.
Y está desde luego el valenciano Enrique Ponce que con el morbo de su reaparición se ha vuelto a revaluar en lingotes de oro, pensemos nada más lo que va hacer esa reaparición, que se podría dar en Málaga o en el Puerto de Santa María; Enrique Ponce, Javier Conde y Morante de la Puebla. Ya se habla hasta de los toros de Juan Pedro Domecq. ¿Por qué no traer a México ese cartel?... ¿Por qué?, porque falta uno o dos chilangos o provincianos, ¿y los subalternos y los monosabios no cuentan?, ¡no! ellos son extraterrestres, solventado eso, a pensar con los sesos háganle como en España venta obligatoria de abono, un par de festejos estelares y pa’ completar el balance o promedio dos con puros nacionales uno grande y uno chico y hasta una becerrada del 11 con “El Maletilla” y Emiliano Osornio a la cabeza y “El Castellita” acicateándolos.
Eso es lo que se necesita, que la Fiesta sea atractiva fuerte y de interés pa’ que los gobiernos visualicen los millones de pesos que les entrarían vía permisos e impuestos y cuando vean que las Corridas son una fuente de ingresos mayúsculos lo primero que van hacer es protegerla.
Busquemos ya como echar a andar las neuronas, porque esto en verdad que está oscilando entre un milagro y un sepelio pa’ el que ya hay quien cargue el cajón, y es que tan seguido le están pateando el trasero a la Fiesta que en una de esas no se levanta y hay que ver esto desde todos los puntos no nada más hoy por del Caribe donde un par de desadaptadas sociales dejaron el metate y se subieron a la hamaca legislativa, sin haber conseguido siquiera un título en ‘Las Academias Vásquez’, ni menos haber luchado por ser votadas todo al amparo de los plurinominales, desde donde se les prendió el foco de proteger a sus semejantes y vámonos a alborotar la gallera legislativa sin ton ni son, con los resultados ya sabidos, y aquí si no cabe eso de ‘Señor perdona a las pendejas por lo que hicieron’ ¡No! porque aparte de romperle la crisma a una tradición que araña los quinientos años, van a dejar sin sustentos a quienes viven de los más de 250 festejos feriados en el estado y a los gobiernos municipales y al estatal les van cerrar las llaves de los dineros recaudatorios, ahí está una muestra más de la degradación de los Partidos Políticos, que aceptan a cualquier ignorante incluyendo a las que van por la libre en las curules, cuando las pudieron haber remitido a recoger sargazo, o de perdida a cualquier zona de tolerancia ¿a ver si ahí las toleran?, pero nunca debieron de aceptarlas en la carpa de las incoherencias y la incultura.
¿Cuántos festejos se daban anualmente en Cancún?, muy pocos por eso se le fueron encima, la Fiesta estaba débil, no así el interior del estado que es un manantial de festividades donde la tradición va a ser asesinada.
Pensemos que hoy fueron los toros, mañana los parques de diversiones donde pa’ los disque protectores de animales que les llevan votos a los partidos el cautiverio es privación de la libertad; cárcel, sufrimiento pa’ las especies, vil esclavitud que viven las aves, como los delfines en sus delfinarios, los peces multicolores en los acuarios, los animales en zoológicos, ¿me estas oyendo Xcaret? van tras de ustedes.
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