Publicado por JUAN LAMARCA
Del toro al infinito
Mérida / Dic 7, 2018
Nos llegó diciembre con sus alegrías y celebraciones, más limpios que alma de recién nacido, pero con el espíritu indomable cual amazona de las de antes y caballeros de los que mi Nono llamaba Señores, de esos que, sin mucha alharaca, ni necesidad de… dejémoslo en tratar de caminar con tacones sin saber hacerlo… resuelven, aportan soluciones y buscan hasta debajo de las piedras para cubrir los gastos de las necesidades. Entiéndase entonces, para los taurinos, disfrutar de una tarde de toros, festival, novillada, coloquio, encuentro o compartir es “una necesidad”
Los anuncios de festivales, ferias, coloquios en Los Andes venezolanos, cada uno en sí mismo, es un éxito tan grande como el orgullo de ver a la Román Eduardo Sandía, ese ícono taurino merideño que éste 8 de diciembre cumple 51 años de su inauguración, entre mantenimiento y reparaciones, prepararse, para luego engalanarse con brillantes colores que le permitan mostrarse cual elegante matrona esperando recibir la quincuagésima Feria Internacional del Sol, donde los aficionados, pedimos a la Santa Patrona de Mérida, Virgen de la Inmaculada, toque el corazón de las figuras que en su plaza se han vestido de gloria, para que terminen por aceptar venir y regalarnos esa alegría a la Venezuela Taurina.
Entre las marchas en defensa de las corridas, el anuncio de carteles de San Sebastián, la nueva Comisión Taurina de Tovar, las noticias de conversaciones con figuras que ya han actuado en la Feria del Sol y otras emergentes que se espera echen la pata pa´lante, el festival del 15 de diciembre en Mérida para celebrar, una semana después el cumpleaños de la plaza y la espera de los carteles de Mérida, la región andina taurina por excelencia, tiene motivos para estar alegres, olvidando por algunos momentos, sumergidos entre capotes, sol y arena, el acontecer diario, que por cierto pedimos también al altísimo, mejore como considere conveniente, pero que mejore!!
Claro está, mientras para unos la tauromaquia es una pasión de la cual se disfruta bonito, para otros es un banderín de sumar a su ego, superando lo aprendido entre líneas de Maquiavelo gracias al veneno propio de sus almas… algunos porque tienen las herramientas y el tiempo y otros porque no saben hacer otra cosa… cacareando esponjados cual gallina vieja cuando logra poner un huevo, hablando hasta lo que no deben, o adjudicándose lo bueno que no hacen, mientras otros... bueno observamos tras entregar los trabajos.
Ya lo decía Maquiavelo “Los odios de los hombres generalmente nacen del temor o de la envidia” cabe preguntar, de verdad creen que aportan a la fiesta? O ya ni les da pena pregonar su propia forma de ser, esparciéndola a manos llenas, como si hicieran caridad.
Si su envidia fuesen dólares pareceríamos bóveda del City Bank y no sufriríamos por no tener los ansiados verdes, ni el tiempo, para ir de feria en feria por el mundo… ah eso si… ni se esfuercen en pedir la cola que avioneta tampoco la tenemos. Y sí, el bien ganado apodo de NECIA, me lo he ganado a pulso, Así que seguiré golpeando la roca pues algún día quiero ver al toro, como me decía mi Nono, con pura gente buena, de honor y trabajo por delante. Como mi Venezuela merece! Por cierto, tengo preparada la escoba… no sé si para barrer o quizás volar tacón en mano.
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