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(Coloquio Astauros)
En un largo e intenso coloquio de casi cuatro horas Miguel Ángel Moncholi se encuentra con la afición de Cali. El estado actual de la fiesta en el mundo y sus perspectivas fueron analizadas interactivamente por el comunicador español y miembros de los diferentes estamentos del toreo.
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| Jorge Aruro Díaz, Miguel Ángel Moncholi, Humberto, Botero, Joselito Ortegón (matador), Carolina Baquero y Enrique Calvo "El Cali" (matador.). Fotos Julián Andrés Franky. |
El acto presidido por Humberto Botero Jaramillo, presidente de las corridas en Cañaveralejo y directivo de la Asociación de Cronistas y aficionados del occidente colombiano (Astauros) copó el salón Tory Castro de la plaza de Cañaveralejo, pese a qué a pocos metros, en el ruedo, se desarrollaba el multitudinario lanzamiento oficial de la Feria 60 de Cali.
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| Foto; Julián Andrés Franky |
La exposición del conferencista invitado enmarcada en contextos históricos, fue matizada, discutida y aplaudida, por el auditorio y los muchos asistentes que llevaron la palabra. Examen, diagnóstico y pronóstico de la tauromaquia en general, no solo de las corridas. Atendiendo a las dificultades de articulación con una sociedad que habita mega urbes, en la virtualidad de un mundo informatizado, de espaldas a la naturaleza, inmersa en violencias de todo tipo e hipócritamente impermeable a los valores éticos y estéticos de la Fiesta. Los cuáles infama como anacrónicos, bárbaros e intolerables, satanizándolos, prohibiéndolos y persiguiéndolos.
Moncholí dejó escapar lagrimas que por instantes interrumpieron su discurso, cuando evocó a sus padres y abuelos legatarios de su afición.
La tauromaquia para sobrevivir debe ponerse a tono con los tiempos que corren, sí. Cambiar lo innecesario, pero mantener los principios fundamentales. No sacrificar la esencia para salvar "el negocio". Fue quizá el consenso final. Eran más de doce de la noche y llovía cuando salieron los últimos contertulios.
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