Vanegas resolviendo la papeleta con decoro ante el novillo más exigente, en suelo francés |
RUBÉN
DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
Toros de hierros de máximo interés y
exigencia. Esa fue la materia prima que este domingo tuvo en sus manos el
espada tachirense Manolo Vanegas en el curso de su campaña novilleril en ruedos
ibéricos, donde actuaría en la localidad gala de Aire Sur L’Adour, festejo en
la que se despacharon reses de los hierros de Valdellán (1º, 2º) y Saltillo
(3º, 4º, 5º).
Utreros estos de correoso comportamiento,
pues el cartel quedaría en un mano a mano, tras el percance que sufrió el
novillero Alejandro Conquero, quien pese a volver al ruedo tras ser herido en
el muslo derecho ante el segundo de su lote, de nuevo resultó volteado, para no
salir del hule.
El balance del festejo fue el siguiente: Manolo
Vanegas, silencio tras aviso, silencio en el que mató por Conquero, y ovación
tras aviso. Tibo García, palmas, silencio tras aviso en el que mató por
Alejandro Conquero y silencio.
Precisamente el próximo domingo en suelo
galo, específicamente en Alès estará de nuevo Vanegas actuando, junto con Alejandro
Conquero si se recupera del percance, ante reses del hierro de Cuillé.
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