Aficionados se enfrentan
a la bravura en Acho
Ayer, en la Plaza de Acho, seis aficionados y un matador lidiaron enrazados novillos en el tercer Festival de la Tradición.
PABLO J. GÓMEZ DEBARBIERI
Ayer en Acho, como complemento a la Feria del Señor de los Milagros, seis aficionados de tres países taurinos se enfrentaron a las enrazadas embestidas de un lote de bravos novillos. Los peruanos José Ignacio Bullard, José Alfredo Koechlin, Raúl Aramburú y Enrique Sifuentes, junto al mexicano Carlos Allende y al ecuatoriano Juan Sebastián Roldán, pusieron a prueba su valor y conocimientos taurinos. Completó el cartel el matador español Emilio Serna. El reglamento taurino del Rímac exige que un profesional acompañe a los aficionados prácticos. El festejo fue a beneficio de las obras sociales de la Beneficencia de Lima.
El novillo para Serna –el de mayor presencia− fue de Villa Graciela, ganadería ayacuchana de propiedad de Alfredo y Gabriel Prado, procedente de Camponuevo, de Rafael Puga. Tuvo magníficas hechuras, pero fue manso y complicado. Serna estuvo por encima de él.
FOTO: PABLO JAVIER GÓMEZ DEBARBIERI
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SOBREPONIÉNDOSE. José I. Bullard superando las complicaciones de su novillo, en lucido muletazo.
El tercero, de El Olivar, ganadería trujillana de Aníbal Vásquez de las Casas, tuvo complicaciones y tendencia a tablas. Koechlin estuvo decidido; de haber comprendido mejor al novillo y haberle dado salida siempre hacia los adentros, se hubiera lucido más.
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TERCER NOVILLO. José Alfredo Koechlin lanceando al de El Olivar.
Los siguientes, todos de Villa Graciela, bien hechos y en tipo; bravos, interesantes y enrazados. Exigieron a sus lidiadores.
El cuarto, para Allende, fue extraordinario. Bravo, repetidor y con clase, exigía un torero muy puesto. El azteca equivocó la lidia y quiso torearlo al hilo del pitón, como si fuese de sangre mexicana, en vez de cruzarse al pitón contrario y llevarlo muy toreado. El astado −desaprovechado por completo− le perdonó múltiples errores. Era para triunfo grande.
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BUEN NOVILLO. El mexicano Allende no estuvo a la altura de su bravo enemigo.
Aramburú, a pesar de ser cogido de capote, se repuso y sacó partido del novillo. Algunas series tuvieron muletazos lucidos, con gusto y valor.
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Roldán tuvo ante sí otro buen novillo; le pegó una fuerte voltereta. A pesar de ello, ya repuesto, hizo una faena campera y cortó la única oreja de la tarde.
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TERCER FESTIVAL DE LA TRADICIÓN
GANADO
De Villa Graciela, Ayacucho (primero y del cuarto al séptimo); El Olivar, La Libertad (segundo); y Toto Chirinos, Arequipa (tercero).
EMILIO SERNA (ESPAÑA) Silencio.
JOSÉ IGNACIO BULLARD (PERÚ) Ovación.
JOSÉ ALFREDO KOECHLIN (PERÚ) Palmas.
CARLOS ALLENDE (MÉXICO) Silencio.
RAÚL ARAMBURÚ (PERÚ) Vuelta al ruedo.
JUAN SEBASTIÁN ROLDÁN (ECUADOR) Oreja.
ENRIQUE SIFUENTES (PERÚ) Vuelta al ruedo.
Los toreros actuaron vestidos de corto o con traje típico; de chalán y de charro.
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