miércoles, 26 de noviembre de 2014

HAY UN ARMILLITA EN LA PLAZA…LA FIESTA ESTÁ DE FIESTA por EL VITO

HOY LA FIESTA ESTÁ DE FIESTA

EL VITO



Era el grito de guerra de la Señora Nieves, cuando Miguel tomaba el camino  Jesús María hacía la plaza de toros de “Aguas”. Allí Miguel Espinosa defendería, como siempre lo hizo, el bastión glorioso del “armillismo” con los colores que en su día y época izara el maestro de maestros Fermín Espinosa Saucedo “Armillita”.

"¡NO TE DEJES MIGUEL!"

Imagino que el domingo Fermín Espinosa Díaz de León, nieto de la Señora Nieves Menéndez escucharía, cuando caminaba hacia los medios del monumental coso de Insurgentes aquella arenga que, emocionada, convocaba la bella señora de los ojos azules y franca sonrisa en ese rostro de madre amantísima que jamás mostró agobio y sí orgullo por la torería de sus hijos.
Fermín Espinosa tenía motivos para sentir presión. En esa arena que le vimos pisar lleno de seguridad, es  mudo testigo de aquellos triunfos de apoteosis de su abuelo el Maestro Armillita, o los muchos logrados por su tío Miguel como aquel  con aquel magnífico toro de don Fernando de la Mora … y muchos más que quedarían registrados en el devocionario popular del toreo mexicano.
El toro “Pata Negra” de Bernaldo Quirós ni tenía bellota en la vejiga y mucho menos los orígenes de este pata negra eran  onubenses. Fue de patas quietas, agarrado al piso, sin emotividad, de bobaliconas acometidas un toro ante el que era casi imposible transmitir la emotividad que en esos momentos de importancia para la vida del torero embargarían su corazón.
El "casi" lo agregó Fermín Armillita como respuesta a lo que esperábamos de su cita, lo hizo con su técnica ortodoxa heredada por décadas de la más universal de las escuelas del toreo. Esa escuela que tiene su Alma Mater intramuros de Chichimeco, donde los fantasmas del armillismo saltan en cada rincón de la vieja hacienda sonrientes el matero Ferrmín, Juan y Zenaido expresando la felicidad que viven los seres eternos en el olimpo del toreo.
Hoy hay fiesta en el toreo, porque hay fiesta en la Casa de Armillita. Ha regresado a la arena el toreo sin las estridentes trampas del truco y porque vuelven las ciencias exactas del toreo de Armillita.




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