lunes, 1 de abril de 2013

NOTAS MEXICANAS Adiel Armando Bolio

Oreja con “sabor amargo” para Efrén Rosales

Por: ADIEL ARMANDO BOLIO

La tarde de este Domingo de Resurrección en el coso San Marcos de la ciudad de Aguascalientes, dentro de la que fue séptima novillada del serial menor internacional 2013, fue de esas en las que sí, en efecto, hubo un triunfador, pero se queda uno con ese “pudo haber estado mejor” o “bien hubiera redondeado la actuación”, vamos que el entusiasta espada Efrén Rosales nos hizo recordar aquel poema de maestro granadino Manuel Benítez Carrasco, las letrillas del “Pero Amargo” que en parte dicen así:
“Fracaso del ‘sin embargo...’,
fatal derrota del ‘pero...’,
‘pero’ amargo,
torero, triste torero.

Valiente como el primero,
marchoso como el que más,
pero...
Quiso ser un gran torero,
pudo ser un gran torero
más grande que los demás,
pero...”
Y es que no necesariamente o de manera tácita y expresamente tiene que ser como dice tales letrillas, pero si queda ese sabor a hiel que nos impidió ver el triunfo fuerte de Efrén, quien sin duda se habrá quedado igualmente con esa “espina clavada” al no haber podido redondear su actuación, que si la juzgamos con dureza fue tacaña pues únicamente se conformó con una oreja de su primer astado y que no fue del gusto general del público.
Ojalá y de verdad que este apéndice le sirva a Rosales para colarse a la Feria Nacional de San Marcos pues consideramos en su descargo que aún puede dar más de sí, tomando en cuenta que esta fue su reaparición tras la grave lesión que sufrió en la rodilla derecha y recuperarse mentalmente de ello y además de un nada halagador diagnóstico en el sentido de que pudo no haber vuelto a caminar de manera normal, no es fácil. Lo logró Efrén, pensamos que por ese lado ya se alivió y ahora a ver para adelante para buscar otras oportunidades que lo vayan poniendo mejor en la cara de los astados pues personalidad la tiene y en momentos es arrolladora. Así que mi querido Efrén Rosales no se me achicopale y “pelillos a la mar”.
Otro que igualmente pudo haber triunfado fuerte fue el debutante en esta plaza, el extremeño Emilio Martín, quien sabe muy lo que hace y para qué lo hace. Tiene técnica, oficio, valor, sabe desarrollarlos y dosificarlos cuando es necesario y ello lo hace ver como evidente desenvoltura en el ruedo pero a la hora buena está prácticamente perdido, la espada de hecho fue la que le privó de cortar cuando menos un par de orejas, pero aquí el hubiera no existe.
De esta manera, ante otro lleno en el coso San Marcos, holgado, sin apreturas, pero al fin lleno y bajo un cielo encapotado pero clima bochornoso, se lidiaron un astado de La Punta para rejones, complicado y, seis, tres y tres, de las dehesas hermanas de El Jagüey, como divisa titular, y La Playa, siendo de la primera de ellas regular el segundo y complicados cuarto y sexto. Y de la segunda, primero, tercero y quinto, de regular juego, empezando bien pero terminando pronto.

SEBASTIÁN TORRE
El dinástico caballero en plaza potosino, de 20 años de edad y de poca experiencia, dentro de su “verdor”, mostró que gusta de hacer bien las suertes del toreo a la jineta, como mandan los cánones, pero es tanta su ansia por ello que por momentos expone de más las cabalgaduras y más cuando le ha tocado en su presentación sanmarqueña un nada fácil astado de La Punta pues inclusive su yegua tordilla azteca “Carioca” sufrió una cornada grande en el anca derecha. Así, iniciando su labor, misma que le brindó al ganadero Pedro Vaca, arriba precisamente de “Carioca”, del hierro de su tío Jorge Hernández Andrés, toreando con temple a la grupa, falló en el primer rejón de castigo, acertó en el segundo, vino la cornada de la tordilla, cambió de jaca y sobre “Roncal”, del hierro de Pablo Hermoso de Mendoza, clavó otros tres rejones y cuatro banderillas largas. Permutó de montura y ensillado en “Xico” únicamente puso un angustioso palo al violín para volver con “Roncal” y no acertar con el rejón mortal. Echó pie a tierra, se puso nervioso, se le venía el tiempo encima y cuando le iban a sonar el tercer aviso logró dejar un espadazo para salir al tercio entre algunas protestas tras recibir dos recados de la autoridad.

EMILIO MARTÍN
Bien se dejó ver en el manejo del capote el badajocense. En el tercio de varas, buena puya de Ignacio Meléndez. Quitó voluntarioso el ibérico entonces por chicuelinas y Efrén Rosales por saltilleras, lo que no le gustó mucho al lidiador en turno. Tras el segundo tercio de la lidia, el subalterno Gustavo Campos se desmonteró. Su faena de muleta, comenzada con pases ayudados por alto, la realizó con temple y largueza por ambos lados, acompañando con la cintura cada lance y mostrando buenos recursos toreros. No acertó con la espada, le sonaron un aviso y aun así se le aplaudió.
A su segundo lo lanceó bien a la verónica. Estupendo puyazo de Eduardo Noyola “El Morucho” para después quitar el extremeño por zapopinas. El banderillero Jonathan Prado se hizo en el tercio y la faena del menudito diestro hispano, luego de brindarle al ganadero Claudio Huerta, fue a base entenderlo y terminar por torearlo en la zona de tablas pues el “socio” tenía esa tendencia. Le pudo por ambos lados, con valor y torerismo pero igualmente se le hizo de “hueso” y todo acabó con el sonar de dos avisos.

EFRÉN ROSALES
En el primero de su lote, “Amigo”, de El Jagüey, el espada local inició con un farol de rodillas al hilo de las tablas y lances a la verónica. Quitó por gaoneras y le devolvió el favor a Emilio Martín para que éste se dejara ver en un quite por faroles. El espigado novillero brindó su labor al cuerpo médico de la plaza para cuajar un trasteo entusiasta, empezando con temple, clase, buen ritmo y distancia. De la misma manera se mostró por el lado natural. Vinieron un par de descuidos, mismos que se tradujeron en tremendos sustos. La faena se vino a menos. Terminó de estocada delantera y se le otorgó una oreja con algo de “sabor amargo”, sin dejarnos muy convencidos pero al final de cuentas “tocó pelo”.
A su segundo lo recibió con dos faroles de hinojos cerrado en tablas, además de que ya incorporado instrumentó verónicas y un quite por chicuelinas . En varas, el picador Héctor Delgado fue ovacionado por su aguante. Con la muleta, Efrén ejecutó una faena lucida por ambos lados, sobre todo por lo que hizo a través de la mano derecha. Vino otro susto, terminó con manoletinas y cuando había que asegurar el triunfo, falló con la espada y todo se redujo a aplausos.

EDGAR BADILLO
El debutante zacatecano en su primero dio dos largas cambiadas de rodillas en la zona de los tableros para luego de pie lancear con voluntad. En la suerte de varas el picador José Prado sufrió un aparatoso tumbo, saliendo de latiguillo por el cuello del caballo y haciendo el astado por él peligrosamente pero por fortuna todo quedó en el espanto. Quitó entonces el torero por navarras que remató con vistoso manguerazo de Villalta. En el segundo tercio clavó palos con más voluntad que lucimiento y con la muleta, después de brindarle al matador de toros Juan Pablo Sánchez, comenzó con ayudados por alto para seguir con oficio, técnica y buenas maneras pero algo falto de proyección a los tendidos. Manoletinas que sí tuvieron efecto para concluir de pinchazo y media estocada en la yema para ser aplaudido.
Y en el que cerró la larga función, realizó una larga cambiada de hinojos cerrado en tablas y de pie estar voluntarioso en lances fundamentales. Quitó con empeño por zapopinas, banderilleó bien aunque en el tercer par, que fue de cortas y al cambio fue empitonado sin consecuencias. Con la franela se dejó ver con evidente disposición por el pitón derecho y pudiéndole al burel. Tuvo problemas para matar y se conformó con escuchar palmas de aliento.

ÚLTIMA O PENÚLTIMA
Aunque de manera indirecta, para nosotros extraoficial y no por la vía correspondiente, como debe ser, a través de la empresa, nos enteremos de que habrá una novillada más el domingo 14 de abril, por lo que la del próximo domingo 7 de este mes será la octava y penúltima del serial, anunciándose a partir de las 17:00 horas un festejo de selección con Jorge Didier, el venezolano Tomás Martínez, Ricardo Rocha, el colombiano José Manuel Noreña, José Nava y José María Macías, con seis ejemplares de la dehesa de Espíritu Santo.
FICHA: Séptima novillada de la temporada. Coso San Marcos de Aguascalientes. Lleno holgado con cielo entoldado y clima bochornoso. Un novillo para rejones de La Punta, complicado y, seis, tres y tres, de las dehesas hermanas de El Jagüey y La Playa. De la primera fue regular el segundo y complicados cuarto y sexto. Los demás de La Playa, regulares en su juego. El rejoneador Sebastián Torre: Al tercio tras dos avisos. A pie. Emilio Martín: Palmas tras un aviso y dos avisos. Efrén Rosales: Una oreja y palmas. Edgar Badillo: Palmas y palmas. Los subalternos de a caballo Ignacio Meléndez, Eduardo Noyola “El Morucho” y Héctor Delgado fueron ovacionados, en tanto que los de a pie, Gustavo Campos y Jonathan Prado se desmonteraron.

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