José María Manzanares, que recogió este jueves en Córdoba el trofeo Manolete, aseguró que volverá a pasar por el quirófano dentro de diez días para «que la mano izquierda vuelva a funcionar en su totalidad».
El diestro alicantino comentó que después de un «invierno duro» y de una temporada donde la mano «no ha estado al cien por cien», entrará en el quirófano para que «la muñeca vuelva a cumplir su función» y no le suponga una pérdida de movilidad en el pulgar.
Manzanares, que será padre en un mes, justificó su incomparecencia en las primeras ferias americanas por este motivo, al tener que estar dos meses «con la mano en reposo».
Así, el matador, quien asegura que «habría ido de no ser por la operación», tiene pensado asistir a plazas como las de Cali, Bogotá (Colombia), San Cristóbal y México.
El matador, que ha catalogado la última campaña taurina como «la más importante» de su carrera, matizó que en América no hará «una temporada extensa».
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