martes, 16 de agosto de 2011

LAS MÁS ACREDITADAS REVISTAS DE TOROS, 6 T0R0S 6 Y APLAUSOS, destacan la actuación de Diego Silveti en Gijón


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VITICO RAMÍREZ

Las dos revistas taurinas más importantes de España, 6TOROS6 y APLAUSOS dedican amplios comentarios a la corrida de la alternativa del mexicano Diego Silveti, torero que tiene en agenda un buen número de actuaciones, entre ellas varias en Venezuela.

El corresponsal de 6TOROS6 en Gijón, Julio Cayón escribió: “El toricantano Diego Silveti, solvente toda la tarde y muy capaz con la muleta, cogió pronto la velocidad del astado que le alternativaba abriendo hueco, y muy pulcro, encajando la figura desde los hombros a los talones. Es más: lo movió con escaparate por el pitón derecho. Redondo con el sexto, acortó distancias y se la jugó de verdad sin permitirse ventaja alguna. No cortó orejas porque falló con la espada, pero abandonó la plaza en figura”.

Por su parte Javier Prieto de la revista APLAUSOS escribió: “Diego Silveti superó la prueba con creces. Saludó por verónicas al toro “Lisonjero”, número 54, 465 kilos, negro burraco, nacido en octubre de 2006, ganando terreno. Después, tras cumplir el toro en el peto, quitó por gaoneras. En un parlamento largo, fue investido matador de toros por José Tomás. Acto seguido, se fue a los medios para clavar la vista al cielo y brindar a la memoria del Rey David. Planteó el toricantano una faena maciza, muy asentado, con muletazos en redondo de mucho calado. Por el lado izquierdo, el burraco no iba tan largo y Silveti de forma inteligente volvió al pitón bueno, para cerrar el trasteo. Se fue a por la espada, unas bernadinas tocando al pitón contrario. Dos pinchazos previos a una estocada atravesadilla le privaron un más que posible doble premio. Volvió a estar muy bien con el capote en el sexto, destacando un escalofriante quite por saltilleras. Comenzó con tres péndulos en los medios, como si fuera un guiño a su tío Alejandro, quien señorial y discreto, seguía su actuación desde el callejón. Zapatillas muy asentadas, muleta en el morro y temple para conducir las embestidas por ambos lados. Con el público volcado, manoletinas y , nuevamente fallo a espadas. Pese a todo dio una clamorosa vuelta al ruedo, con el capote de paseo sobre los hombros. Pueden los Silveti estar orgullosos de este nuevo matador llamado a dar horas de gloria a la histórica dinastía”.

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