EL MUNDO Madrid
El Ayuntamiento de Gijón reducirá sus prebendas de cara a la próxima Feria de Begoña de Gijón. «Se acabaron los privilegios en la plaza de toros. Los concejales deberán ir a la cola, como el resto de los ciudadanos, y todos tendrán las mismas posibilidades, si lo desean, de ver, por ejemplo, a José Tomás», asegura Fernando Couto, concejal responsable de los espectáculos taurinos en El Bibio, según informa El Comercio.
Hasta el momento, el Ayuntamiento disponía de once palcos y de cien localidades de andanada para cada corrida de toros, pero, a partir de ahora, el Ayuntamiento renuncia a siete de esos once palcos. A cambio de otros dos palcos, el empresario dará al Ayuntamiento 24 abonos de 50 euros cada uno.
Por lo que respeta a las entradas de andanada, la empresa abonará al Ayuntamiento 2.000 euros, equivalentes a la venta de 100 localidades para una sola corrida, y el resto, si se venden, será directamente de beneficio para el empresario que, eso sí, a cambio de este acuerdo, deberá de abonar al Ayuntamiento 22.600 euros, a sumar al canon anual fijado en el contrato, que se acerca a los 50.000 euros.
El Ayuntamiento pasará de disponer de 11 palcos y cien entradas de andanada por corrida, a tener dos palcos y 24 abonos de 50 euros cada uno.
De esta forma, el equipo de gobierno de Carmen Moriyón quiere hacer realidad la promesa de la alcaldesa de acabar con lo que, consideraba, una desmesura en el protocolo de la plaza de toros para los espectáculos taurinos. Ademas, con los 22.600 euros citados, el Ayuntamiento se garantiza percibir un dinero equivalente al 75% del valor de la recaudación de los once palcos de los que se disponía con anterioridad.
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