Ayer en la Maestranza de Maracay
DOBLEFEO DE TARAPÍO,
BANDEROLLA ESPERANZADORA
Maribel Llorens de Branger, fundadora de Tarapío, con María Luisa Branger de Russian, criadora de Doblefeo junto al triunfador de la tarde el torero de Cagua Javier Silva. Foto de Gladys Castillo |
EL VITO
Siempre es
grato ir a Maracay, y ayer también lo fue regresar luego de haber sido testigo
de la vuelta a los carteles de la temporada nacional de la divisa de Tarapío.
Un regreso
que en esta oportunidad fue revivir lo vivido en el ruedo de Maracay, porque la divisa verde y oro llevó al Calicanto toros
bien presentados, dignamente presentados, izando una banderola de aires esperanzadores ante el tumultuoso becerrismo imperante en la cabaña brava
nacional y que viste las importaciones con las que se sostiene la temporada.
El prefacio a la corrida fue un acontecimiento tragicómico, pues ante la pública renuncia de Leonardo García de participar en el festejo, aparentemente motivada por la presencia de las reses de Tarapío, los organizadores no encontraron en Maracay un torero para sustituirle a quien se autocalifica como “Leonardo de Maracay”. No, amables lectores, no fue posible encontrar un torero en la ciudad que presume seguir siendo lo que un día ya lejano fue, la cantera taurina venezolana.
Así pues que el espectáculo se redujo de una terna a un mano a mano entre dos toreros de Aragua: Juan José Girón, aunque nacido en Valencia maracayero por razones de dinastía, y el cagüeño Javier Silva, hoy afincado en Gerena, Sevilla.
Girón fue ovacionado con el capote en sus tres toros, bajando estruendosamente con la muleta. No porque Juan José no sepa usar la roja sarga, de ninguna manera, pues en destellos nos recordó que guarda monedas de ese tesoro que es la riqueza de la escuela de dinastía. No, Girón más bien estuvo displicente, aburrido, sin ganas de demostrar lo que puede ser. Ocurrió ante su tercer enemigo ante el que, luego de brindarle a un espectador, Juan José Girón echo mano a la espada y sin mayor preparación liquidó a su oponente, el que, por lo visto en los caballos, merecía por lo menos averiguar si valía para la muleta. Creemos que sí, pero vaya por delante su palabra, “maestro”.
Si Javier Silva se atreviera, o mejor dicho estuviera dispuesto a dar un par de muletazos más de los muy despaciosos pases que con mucho y muy sentido temple dibujara en el cuarto de la tarde, estamos seguros podría vivir de esto y lo haría sin apreturas. Pero Javier se satisface, o más bien se conforma con las migajas y sólo está a gusto con trazar tres pases para rematar de cualquier manera con el remedo de un pase de pecho. En pocas palabras, carece de ambición este torero. Al sexto de la tarde, un buen toro que por su presencia y nobleza, él solito se indultó, el torero no le varió la dosis muletera en su argumento para lidiarle. Muchos fueron los pases, algunos valiosos, pero que no fue capaz de reunirlos en alguna tanda que justificara su presencia ante un toro de tanta calidad e importancia.
Salimos
satisfechos por haber ido a Maracay, en esta oportunidad porque disfrutamos de
una corrida de toros donde hubo de todo un poco, mucho lo que nos brindó el
toro Doblefeo de Tarapío, jun toro que, no
dudamos, habrá de crecer en el recuerdo de los mejores aficionados.
FICHA DE LA CORRIDA
Maracay, 2
de agosto de 2015
Plaza de
toros “César Girón”
TOROS: Seis de Tarapío, con edad, presencia
y bien armados que tuvieron variado comportamiento. TUCANITO, 33 con 487 Kg. Cumplió en varas, noble en sus embestidas;
CEREJITO ,02 con 544 kg fue bravo
con el caballo, nobleza y calidad en sus embestidas: MOLINERO 21 con 470 kg, cumplió en varas FADÓN, 94 con 433 kg, manso
en el caballo doliéndose al hierro. Fue injustamente castigada la divisa de la
ganadería con banderillas negras, pues al toro le picaron. Tuvo nobleza en sus
embestidas: INDIANO, 24 con 487 kg.
cumplió en varas y fue estoqueado sin que su lidiador intentara lidiarle : DOBLEFEO 25, 487, un buen toro por su
presencia y comportamiento. Bravo y con calidad en varas, toro serio y de mucha
nobleza. Tuvo calidad en sus embestidas pero exigió respeto en cada lance.
JUAN JOSÉ GIRÓN celeste y azabache, palmas,
Silencio y pitos
JAVIER SILVA de aguamarina y oro: silencio,
silencio y dos orejas simbólicas.
LEONARDO DE MARACAY se cayó del cartel negándose lidiar
toros de Tarapío exigiendo, según dijo, había sido contratado, por lidiar un
toro de Campolargo.
ENTRADA: Un tercio de plaza
DETALLES: En estado ruinoso la Plaza de la
Maestranza, sin luminarias dentro y fuera del inmueble, desconchándose las
paredes de la obra del Carlos Raúl Villanueva, patrimonio de la arquitectura
nacional.***SE ESTRENÓ en la
presidencia de la Comisión Taurina el
Ingeniero Armando Marín, manejó con acierto la conducción del espectáculo
extralimitándose, tal vez, al ordenar banderillas negras al tercero de la
tarde. *** INCREIBLE la actitud del
matador de toros Leonardo García (Leonardo de Maracay) al negarse torear,
habiendo estado anunciado en el cartel alegando que sólo lidiaría un toro de
Tarapío y otro de Campolargo der acuerdo al contrato por él suscrito con el
organizador Miguel López. *** INCONCEBIBLE
que no hiciera el despejo de plaza el Alguacilillo “por no tener caballo”.
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